En una semana marcada por el movimiento del dólar, el Banco Central de la República Argentina (BCRA), comandado por su presidente, Federico Sturzenegger, comunicó que decidió reducir su tasa de política monetaria, “el centro del corredor de pases a 7 días, en 75 puntos básicos, a 28 por ciento”.
“El Banco Central será cauteloso en la adecuación de la política monetaria al nuevo sendero de desinflación”, indica el comunicado de la autoridad monetaria.
La meta “intermedia” del BCRA es tener una inflación de 15 por ciento en 2018. En este sentido, el comunicado oficial agrega: “Naturalmente, si se busca una menor velocidad de desinflación que la planeada originalmente, corresponde un sendero de política monetaria menos contractivo que el que antes se preveía. Pero esa moderación en el sesgo contractivo sólo podrá sostenerse en el tiempo en la medida en que la evolución de la desinflación sea compatible con la trayectoria buscada”.
El BCRA recordó además que en diciembre “se dio a conocer, además, una secuencia de transferencias del BCRA al Tesoro que para 2019 reduce en términos nominales dicha asistencia a la mitad de la ya establecida para 2018 y que, para los años subsiguientes, está definida por una regla automática no vinculada a la tasa de inflación sino al crecimiento real de la demanda de dinero”.
De esta manera, la autoridad monetaria se mostró precavida y gradualista a la hora de avanzar en el camino de reducción de la tasa de interés registrada de manera implícita con la modificación de metas de inflación, con lo que desairó a quienes apostaban para hoy por una baja del costo del dinero de dos puntos porcentuales o más.