La CGT convocó a “un inmediato paro general nacional” de 24 horas para el caso de que el presidente Mauricio Macri firme un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para aplicar la reforma previsional que hoy no pudo debatir la Cámara baja.
La principal central obrera, además, ratificó el estado de sesión permanente de su consejo directivo y el secretariado nacional y adelantó que el lunes comenzarán a sesionar todos “los mecanismos gremiales” para analizar “la profundización de la protesta” ante “el cuadro de situación imperante”.
El triunvirato de la CGT que integran Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña ofreció esta tarde una conferencia de prensa en la sede de Azopardo 802 luego de más de dos horas de deliberaciones y confirmó la huelga general de 24 horas de forma inmediata para el caso de que el Ejecutivo apruebe la reforma por DNU.
Los dirigentes sindicales rechazaron y repudiaron “los tristes y lamentables momentos que vivió hoy el país en torno del Congreso Nacional”, la “militarización total” del Parlamento y sus adyacencias y “la feroz represión que sufrieron los trabajadores”.
“Hubo una feroz golpiza a los compañeros trabajadores, balas de goma, palazos y gases lacrimógenos. Y todo para intentar sancionar un proyecto que sostiene el ajuste”, señaló Daer, quien criticó las declaraciones del Jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, al señalar que lo que “el funcionario no dijo es que la realidad es consecuencia de la falta de coherencia y dirección económica, como también de las malas políticas”.
“El gobierno eligió a los jubilados, el sector más vulnerable de la sociedad, para realizar el ajuste. El Ejecutivo y el Congreso deberían cargar las tintas sobre quienes más tienen si el gobierno procura satisfacer necesidades fiscales”, dijo Schmid.
“Sería lamentable que si el Congreso dijo hoy ‘no’ a la reforma, el presidente utilice la figura del DNU. El proyecto previsional es una mera sustracción salarial. Lo que debe hacer el oficialismo es una amplia convocatoria para rediscutir el tema”, afirmó Schmid.
El también jefe de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y dirigente marítimo subrayó que el movimiento obrero y la sociedad tienen “la esperanza y la convicción democráticas de que no haya un DNU, porque el gobierno se jactó durante dos años de privilegiar el diálogo y el acuerdo”, en tanto sostuvo que si se firma ese instrumento “se violaría la vida institucional y a los sectores más vulnerables”.
Para Schmid, “el blindaje del Congreso y sus adyacencias y la represión de trabajadores y ciudadanos no resolverá ninguno de los problemas sociales del país. Esto debería saberlo la ministra de Seguridad (Paricia Bullrich). Se asiste a una realidad en la que primero se dispara y luego se pregunta”, puntualizó el dirigente.
“Un decreto de necesidad y urgencia es inconstitucional. Ya en el último Comité Central Confederal (CC) realizado en el gremio de La Fraternidad (de Omar Maturano) la CGT expresó de forma clara y contundente lo que muchos se preocupan por no decir o recordar: de ninguna manera la central obrera dejará de defender la Ley de Contrato de Trabajo (LCT), el modelo de obras sociales, las convenciones colectivas de trabajo de jerarquía internacional y la ultraactividad. Nada de ello será resignado”, ratificó Schmid.
Por su parte, los dirigentes bancarios Sergio Palazzo y Eduardo Berrozpe aseguraron esta noche que si la reforma jubilatoria es aprobada por DNU o a través de “la extorsión en el Congreso” el gremio se sumará a la huelga general, al tiempo que llamaron a definir “un plan de lucha hasta que se retiren y/o cesen las medidas contra jubilados o activos”.
La adhesión de la Asociación Bancaria (AB) al eventual paro de la CGT impediría el funcionamiento de los bancos.
Los triunviros cegetistas fueron acompañados en la rueda de prensa por los dirigentes Francisco Gutiérrez (metalúrgicos), Omar Plaini (canillitas), Oscar Romero (docentes), Juan Pablo Brey (aeronavegantes) y Julio Piumato (judiciales), entre otros.
(Con información y foto de Telam)