Tres científicos ganaron el Nobel de Química por crear un avanzado microscopio

El microscopio electrónico dio paso a una nueva era en la química orgánica y permite visualizar estructuras biomoleculares con enorme detalle.

Jacques Dubochet, Joachim Frank and Richard Henderson llevaron la bioquímica a “una nueva era”. Así presenta la Academia Sueca a los tres científicos que hoy se convirtieron en los nuevos galardonados con el premio Nobel de Química.

Los responsables del Nobel argumentaron que la bioquímica muchas veces se topaba con la dificultad de crear sus propios mapas moleculares por la tecnología disponible, que no llegaba a registrar la maquinaria molecular. Sin embargo, los tres investigadores hoy premiados son los responsables de de la creación de un potente microscopio cryoelectrónico que superó esta barrera.

A partir  de esta herramienta, hoy los científicos pueden congelar biomoléculas y visualizar procesos nunca antes vistos. El microscopio tuvo una importancia mayor en el entendimiento la química orgánica y en los avances para la creación de nuevos fármacos.

La historia del microscopio cryoelectrónico se remonta a los esfuerzos de Frank,  entre 1975 y 1986, cuando desarrolló un proceso de creación de imágenes 3D de  con un microscopio de electrones. Hasta la década del 90, se creyó que los microscopios electrónicos eran adecuados solo para la obtención de imágenes de materia muerta, porque el potente haz de electrones destruye material biológico.

Pero esto cambió con el paso exitoso de Henderson, quien logró, al usar el microscopio electrónico, la imagen en 3D de una proteína a escala atómica. Esto no hubiera sido posible sin el aporte de Dubochet, quien le agregó agua a la herramienta. Esto permitió que las biomoléculas no se destruyan y conserven su forma natural, incluso en el vacío.

Tras estos descubrimientos el microscopio electrónico avanzó todavía más. Gracias a él y al trabajo de Dubochet, Frank and Henderson hoy en día los investigadores pueden ver y producir estructuras atómicas y conocer los secretos de proteínas, estudiar por qué las bacterias son resistentes a los antibióticos y visualizar la estructuras de virus que amenazan a las personas, como el Zika.