El cambio climático afecta a todas las regiones del mundo y ya hay cambios irreversibles

Un trabajo de expertos de todo el mundo advierte que los cambios observados en el clima no tienen precedentes y que algunos ya se han puesto en marcha, como el continuo aumento del nivel del mar.

Que los seres humanos somos los principales responsables del cambio climático era ya una evidencia que el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), publicado este lunes, ha vuelto a recalcar. El trabajo advierte que los cambios observados en el clima no tienen precedentes y que algunos ya se han puesto en marcha y son irreversibles, como el continuo aumento del nivel del mar.

Sin embargo, una reducción fuerte y sostenida de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros gases de efecto invernadero limitaría el cambio climático. Mientras que los beneficios para la calidad del aire llegarían rápidamente, podrían pasar entre 20 y 30 años para que se estabilice la temperatura global, según el informe del Grupo de Trabajo I del IPCC.

“Este documento refleja un esfuerzo extraordinario en circunstancias excepcionales”, ha dicho Hoesung Lee, presidente del IPCC. “Las innovaciones de este informe y los avances en la ciencia del clima que refleja suponen una aportación inestimable a las negociaciones sobre el clima y a la toma de decisiones”, ha añadido. La próxima Cumbre del Clima (COP26) se celebrará en Glasgow (Reino Unido) del 1 al 12 de noviembre de 2021.

Valérie Masson-Delmotte, copresidenta del grupo de Trabajo I del IPCC, ha subrayado esta mañana en rueda de prensa que, “a menos que se produzcan reducciones inmediatas, rápidas y a gran escala de las emisiones de gases de efecto invernadero, la limitación de no superar calentamiento global en hasta 1,5 °C [con respecto a los niveles preindustriales] será inalcanzable”.

El informe Cambio climático 2021: las bases de la ciencia física se aprobó el pasado viernes por 195 gobiernos miembros del miembros del IPCC, a través de una sesión virtual que se celebró durante dos semanas. Supone la primera entrega del Sexto Informe de Evaluación del IPCC que se completará en 2022.

Los expertos han destacado esta mañana, durante la presentación de los resultados que llevan años advirtiendo que las consecuencias ya están aquí, “aunque el mundo oye, pero no escucha. Ahora es más visible y más grave”.

“Se trata de una cruda evaluación del aterrador futuro que nos espera si no actuamos. Con el mundo al borde de un daño irreversible, cada fracción de grado de calentamiento es importante para limitar los peligros del cambio climático. Está claro que mantener el calentamiento global en 1,5 ºC es un reto enorme y solo puede hacerse si se toman medidas urgentes a nivel mundial para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y proteger y restaurar la naturaleza”, ha afirmado Stephen Cornelius, asesor principal sobre cambio climático y líder mundial de WWF en el IPCC.

La acción humana detrás del rápido calentamiento

El estudio ofrece nuevas estimaciones sobre las posibilidades de superar el nivel de calentamiento global de 1,5 °C en las próximas décadas. Asimismo, destaca que las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de las actividades humanas son responsables de aproximadamente 1,1 °C de calentamiento desde 1850-1900.

Mantener la actual situación, en la que la temperatura global es de media 1,1 grados más alta que en el periodo preindustrial, no es suficiente. De continuar así, en 2040 se alcanzaría los 1,5 grados de media, en 2060 los 2 ºC y en 2100 llegaríamos a 2,7 ºC.

En promedio, durante los próximos 20 años se espera que la temperatura global alcance o supere los 1,5 ºC de calentamiento. Esta evaluación se basa en la mejora de los datos de observación para evaluar el calentamiento histórico, así como en los avances científicos de la respuesta del sistema climático a las emisiones de gases de efecto invernadero de origen humano.

“Este informe es una prueba de la realidad”, ha señalado Masson-Delmotte. “Ahora tenemos una imagen mucho más clara del clima pasado, presente y futuro”.

Fenómenos extremos en aumento

El nuevo trabajo también facilita información para la comprensión del papel de la crisis climática en la intensificación de determinados fenómenos meteorológicos y climáticos extremos, como las olas de calor extremas y las lluvias torrenciales.

“Hace décadas que está claro que el clima de la Tierra está cambiando y el papel de la influencia humana en el sistema climático es indiscutible”, ha indicado Masson-Delmotte.

El informe muestra que las acciones humanas todavía tienen el potencial de determinar el curso futuro del clima. La evidencia es clara en cuanto a que el dióxido de carbono (CO2) es el principal impulsor de estos cambios.

“Estabilizar el clima requerirá una reducción fuerte, rápida y sostenida de las emisiones de gases de efecto invernadero y llegar a cero emisiones netas de CO2″, ha declarado Panmao Zhai, copresidente del Grupo de Trabajo I del IPCC.

Un análisis detallado por regiones
El informe prevé que en las próximas décadas el calentamiento aumentará en todas las regiones. Con 1,5 °C de calentamiento global, habrá más olas de calor, estaciones cálidas más largas y estaciones frías más cortas.

Con 2 °C de calentamiento global, los extremos de calor alcanzarán más a menudo los umbrales de tolerancia críticos para la agricultura y la salud.

Por otro lado, las características del cambio climático no se experimentan de la misma forma en todos los lugares. Por esta razón el informe detalla el impacto por regiones.

Pero además de la temperatura, la crisis climática afecta a cambios en la humedad, en los vientos, en la nieve o el hielo. Por ejemplo, el calentamiento en el Ártico es mucho mayor que la media, y un calentamiento amplificará el deshielo del permafrost y la pérdida de la capa de nieve estacional.

En el caso de las ciudades, donde se concentra el grueso de la población mundial, algunos aspectos del cambio climático pueden verse amplificados, como las olas de calor, las inundaciones provocadas por las fuertes precipitaciones y la subida del nivel del mar en las urbes costeras.

(Agencia SINC)