La nueva costumbre de Disney de estrenar directamente en streaming las películas de Pixar viene causando controversias y una gran indignación entre los espectadores, pero también provoca que al poco de que la producción llegue al catálogo se forme una encendidísima conversación en redes. Pasó con Soul, pasó con Luca y ahora está pasando con Red, viniendo precedida por unas exultantes críticas a las que el público correspondió con un entusiasmo considerable. Las desventuras de esta niña que, en plena pubertad, se convierte en panda rojo cada vez que experimenta una emoción fuerte, supieron encandilar al público. Por su propio carácter (Mei es un personaje increíble) y por sus encantadoras amigas.
Desde el 11 de marzo, fecha en la que llegó a Disney+, cada día más usuarios vieron Red, de ahí que la pregunta inevitable (¿habrá Red 2?) haya tomado forma. Pixar no realiza una secuela desde Toy Story 4 (entendemos que su spin-off, Lightyear, no cuenta como una), pero obviamente la opción de dar continuidad a la historia de Mei le pasó por la cabeza a Domee Shi, directora responsable del proyecto, y a su equipo. Quien ganara el Oscar por el corto Bao, y es además la primera mujer en dirigir un largometraje de Pixar en solitario, respondió a la cuestión con vaguedad calculada en Comic Book:
“Estamos abiertas a ello, pero no lo hemos hablado todavía. Eso sí, el final abierto es una invitación a más historias”.
A continuación, (SPOILERS).
Al final de Red, Mei decide desmarcarse la tradición familiar y “quedarse” con el panda rojo, aceptando que este álter ego forma parte de su ser. Un giro que puede dar pie perfectamente a más secuelas, y la productora Lindsey Collins estaría encantada con la labor:
“Con suerte, al final de la película se habrán enamorado tanto de los personajes que les costará dejarlos marchar. Como cineastas nos sentimos así también. Adoro a estos personajes. Nunca me canso de ellos. Siempre pienso ‘volvería a pasar tiempo con ellos’, quiero saber qué es de sus vidas. Así que, ¿quién sabe?”.
En efecto sí, nos hemos enamorado, y también sorprendido por lo que ocurre en Red en torno a su final. Más allá de la decisión de Mei, esta viene precedida por una espectacular escena en el estadio donde toca 4-Town, la boy band favorita de la protagonista y sus colegas. El concierto es interrumpido por la aparición de Ming, madre de Mei, que ha desatado a su propio panda interior y resulta que este es del tamaño de Godzilla. “Siempre supimos que queríamos una batalla madre-hija adolescente a gran escala en nuestro tercer acto. Queríamos que culminara con los dos personajes en una especie de pelea de Kaijus”, explica Shi. En torno a la escala del panda de Ming, mucho mayor que la del de Mei, la directora explica cómo ejecutaron esta idea, recurriendo a un chiste que le diera legitimidad.
“No queríamos inventarnos ninguna regla mágica tonta. Decidimos que la mejor forma de hacerlo era con una pequeña frase de Jin. ‘Era muy grande’. Poco después Mei replica frente a ella ‘¿tan grande?’ y él dice ‘te dije que era grande’. Y así lo dejamos”. Y así lo dejaron.