Nuevos movimientos en el calendario de Warner: “Aquaman 2” y “Shazam 2” se retrasan

Durante el resto del año corriente, la productora solo estrenará “Don’t Worry Darling” y “Black Adam”.

¿Qué consecuencias a largo plazo tendrá la compra de Warner Bros. por parte de Discovery? De momento es imposible saberlo, pero lo que sí podemos asegurar es que esta maniobra financiera está viviéndose como un terremoto en el estudio, según informan The Hollywood Reporter y Variety.

Tras la purga en su catálogo iniciada por la cancelación de Batgirl, ahora Warner volvió a ajustar su calendario de estrenos para retrasar dos de sus mayores blockbusters con el sello DC: Aquaman y el reino perdido y Shazam! Fury of the Gods.

Así, el regreso de Jason Momoa como héroe subacuático pasa de estar previsto para el 17 de marzo a estrenarse el 25 de diciembre. La secuela de Shazam!, inicialmente programada para el 21 de diciembre de 2022, ocupará su hueco, con lo que no la veremos hasta marzo. Algo que la salvará de compartir cartelera con Avatar: el sentido del agua.

Otras películas afectadas por este seísmo son un “blockbuster sin título” que llegará a Estados Unidos el 10 de febrero de 2023, Evil Dead Rise (4 de abril), la secuela de La monja (8 de septiembre) y Salem’s Lot, que pasa de estar prevista para finales de abril a quedar pendiente de confirmación.

A resultado de todo esto, el calendario de estrenos de Warner para el último tercio de 2022 se queda con solo tres películas: el regreso de Olivia Wilde con Don’t Worry Darling (23 de septiembre), Black Adam (21 de octubre) y House Party, remake de la clásica comedia hiphopera de 1990 producido por LeBron James.

El caso de esta última película es el que más sorprende, ya que Warner planeaba estrenarla en HBO Max. Es posible que la tremenda popularidad del original entre el público afroamericano haya salvado a House Party de correr el triste destino de Batgirl.

Desde su twitter, el periodista de The Hollywood Reporter Borys Kit asegura que todo esto se debe a las inmensas deudas de la compañía, que solo tendría fondos para lanzar dos estrenos de gran envergadura durante lo que queda de año. Citando a un “productor exasperado”, Kit resume la situación actual de Warner en pocas palabras: “No tienen dinero, ni tienen ideas”.