El disgusto del juez Bonadio por las críticas de Macri

El magistrado rechazó el discurso que hizo el Presidente, en el que cuestionó las horas de trabajo y las vacaciones de los integrantes del Poder Judicial.

El juez federal Claudio Bonadio rechazó hoy las críticas del presidente Mauricio Macri al Poder Judicial por los regímenes de licencia y de vacaciones, así por los horarios de trabajo. “si ese es el punto de partida para discutir esto, empezamos mal”, consideró el magistrado.

“Hace 48 horas el Presidente hizo una reunión donde citó a empresarios, políticos, sindicalistas, donde criticó al Poder Judicial y no le encontró ninguna virtud”, señaló Bonadio, durante un ciclo de conferencias organizado por el Rotary Club. “(Macri) Discutió vacaciones de supuestamente de 45 días, licencia con goce de sueldo de dos años que no sé dónde está, y el horario de funcionamiento. Si ese es el punto de partida para discutir esto empezamos mal o al menos no empezamos bien”, evaluó el magistrado.

“Tanto Cromañón como la desgracia de Once y la muerte del fiscal (Alberto) Nisman ocurrieron los primeros meses del año y las investigaciones no se detuvieron hasta que no se terminaron”, enfatizó en referencia a la feria judicial. Además, dijo “no” tener “ningún problema” en que le otorguen la licencia que se “merece” y le “corresponde por la ley de trabajo”, pero consideró que “el problema lo van a tener los abogados cuando no haya más feria en enero y no se puedan ir de vacaciones nunca, porque siempre va a haber un juez que le ponga una audiencia”.

Ante la consulta sobre si siente presión por tener a su cargo causas sensibles, respondió: “Asumir el cargo de juez federal conlleva la responsabilidad de decidir sin sentir esa presión. Estoy acostumbrado a saber qué cosas uno tiene qué escuchar y qué cosas tiene que ignorar. La mejor garantía contra las presiones es el expediente y son las pruebas”.

“El alegato de oreja no se lo niego a nadie. Yo escucho, y si lo que me dicen me convence puede ser que vaya por ese lugar, y si no me convence no me importa ni quién lo diga, ni cuántas veces lo diga, ni dónde se publicite”, aseguró. En ese sentido, agregó: “En estos últimos tiempos, no he sentido ni de manera pública ni mucho menos de manera privada que se intentara cuestionar o influenciar mis investigaciones o mis decisiones. Esto no significa que yo vea que todo lo por venir sea necesariamente bueno”.

En otro tramo de su oratoria, indicó que el Poder Judicial tiene “dificultades de equipamiento tecnológico, de espacio físico adecuado, de logística”, pero destacó que está “balanceado” con “un cuerpo humano excepcional”. “Tenemos problemas serios y necesitamos gente seria para una discusión seria donde plantear esta realidad compleja y buscar soluciones de consenso que, sostenidas en el tiempo como políticas de Estado, vuelvan a poner el servicio de justicia al servicio de toda la comunidad, y volvamos a ganarnos el respeto”, enfatizó.