En abril, una familia debió disponer $13.050 para no caer en la pobreza, de acuerdo a la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL). Según el informe, la canasta básica total en el cuarto mes del año subió 2,7% en relación al mismo período de 2016.
El estudio especifica que, una familia necesitó 2.467 pesos adicionales, a comparación del año pasado, para cubrir el costo de la canasta básica. En porcentajes, un 23,3% más.
En detalle, la canasta básica alimentaria también tuvo una suba del 2,7%, según FIEL. Además, en lo que va del año, el aumento fue de 24,2% y alcanzó los $5.621. Un nivel de ingreso menor corresponde, según la categoría del Indec, en un hogar indigente.
De esta forma, se desprende que la canasta básica alimentaria sube más que la total y, en este sentido, la inflación golpea con más fuerza a los sectores de la población más vulnerables, que destinan la mayor parte de sus ingresos a la compra de comida.