En la cuerda floja

El presidente brasileño Michel Temer suspendió sus actividades en medio de la peor crisis por denuncias de corrupción en su contra.

El presidente de Brasil, Michel Temer, en medio de la peor crisis por denuncias de corrupción en su contra, canceló su agenda de hoy y prepara un mensaje al país, dijo a Télam un senador aliado del mandatario que pidió permanecer en el anonimato.

El escándalo se desató luego de que un gran empresario difundió un diálogo entre él y Temer, en el que dá su aval a un esquema de sobornos para comprar el silencio del expresidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cunha, según revelaciones hechas este miércoles por el diario O Globo.

Temer se habría reunido el 7 de marzo con Joesley Batista, uno de los dueños del grupo J&F -que controla el frigorífico JBS-, quien contó al mandatario que mantenía pagos a Cunha y a su operador, Lúcio Funaro, ambos en prisión, para comprar su silencio, publicó el medio brasileño, sacudiendo la escena política del gigante latinomericano.

Según el reportaje, Temer en la grabación respondió a la confesión: “Tienes que mantener eso [los sobornos]”. Adicionalmente, sugirió a Batista hablar con el diputado federal Rodrigo Rocha Loures, hombre de confianza del presidente y miembro de su mismo partido, el PMDB (centroderecha), para asistirlo con otro asunto relacionado con una disputa que el grupo frigorífico mantenía con la estatal Petrobras, esperando respuesta del Consejo Administrativo de Defensa Económica.

“Le puedo contar todo a él [Rocha]?”, preguntó Batista en la grabación, a lo que Temer responde: “Todo”, precisa O Globo. Según la información divulgada, Batista y su hermano Wesley firmaron un acuerdo de delación premiada para obtener una reducción de penas.

El Palacio presidencial del Planalto aún no se pronunció sobre este tema, en tanto que la Procuraduría General de la República y el Supremo Tribunal de Justicia dijeron carecer de informaciones sobre el caso.