El mediodía de ayer se tiñó de luto. Los restos de la vocalista Dolores O’Riordan fueron velados en una capilla del condado irlandés de Limerick, alrededor de sus familiares y numerosos fan que se acercaron a despedirla.
El cuerpo de la cantante del grupo The Cranberries, fallecida a los 46 años el lunes pasado en Londres, por causas que aún se desconocen, fue hallado el lunes pasado en la habitación de un hotel londinense en donde se hospedaba con motivos de una sesión de grabación prevista con el grupo Bad Wolves, de una versión de la canción “Zombie”, uno de los grandes éxitos de The Cranberries.
Según un cable de la agencia EFE, los restos de la vocalista fueron llevados ayer por su madre y sus 5 hermanos a una capilla ardiente de esa localidad, en donde luego de unas palabras del obispo Brendan Leahy se habilitó el ingreso de sus seguidores.
El funeral de la artista está previsto para el martes, en un cementerio de su pueblo natal Ballybricken, ubicado en el mismo condado. A pesar de que aún se desconocen los motivos de su deceso, la policía local descartó la presencia de elementos sospechosos en el lugar del hecho.
La policía metropolitana determinó inicialmente que su muerte no fue sospechosa, sin embargo, se ha practicado una autopsia al cuerpo de la artista y otras pruebas para conocer con exactitud las causas de su fallecimiento. Los resultados de la investigación se conocerán dentro de unos meses.
(Con información de Télam)