Despidos en el sector público y privado

La multinacional Bunge despidió a la mayoría de su planta de Campana. En el hospital Posadas llevan a cabo una “jornada de lucha” por el despido de 122 trabajadores.

Desde ayer rige la conciliación obligatoria de cinco días en la planta de Campana de la estadounidense Bunge. La medida fue dictada por el Ministerio de Trabajo bonaerense, que conduce Marcelo Villegas.

La empresa productora de fertilizantes despidió hasta el jueves pasado a 170 empleados de los aproximadamente 230 que tiene la planta.

“Deben tener un plan, pero no dicen nada”, advirtieron desde el Sindicato de Trabajadores Químicos y Petroquímicos de Zarate-Campana, que sostiene que las empresas del sector buscan avanzar sobre el convenio colectivo de trabajo.

El delegado del gremio, Rubén Ayala, precisó que de los 170 empleados despedidos, 135 están regidos por el convenio del sindicato. Solamente, entre diez y quince aceptaron el retiro voluntario abierto por la compañía. El sindicato reclama la reincorporación de los conveniados.

“Es una medida arbitraria de la empresa. Están trayendo productos terminados de afuera, con la apertura de la importación. Nosotros no nos oponemos, que hagan el negocio que quieran, pero los empleados no vamos a ser la variable de ajuste. Hay muchas cosas para reducir gastos”,  apuntó Ayala, en diálogo con Diario Vivo.

La empresa habría tomado la decisión de despedir alrededor del 74 por ciento de su planta porque se suspendieron algunas de sus cinco líneas de producción de fertilizantes. Desde la firma explicaron que hay un contexto de falta de competitividad, producto de la suba de costos para producir, fundamentalmente los laborales, en un mercado internacional que fabrica los mismos productos a más bajo costo.

El dirigente sindical denunció que los empleados despedidos fueron hoy a la fábrica y están cumpliendo horario, pero no los dejaron fichar. “Anotaron a la gente en una planilla y, en teoría, nos van a dar cursos de capacitación, pero no nos dejan entrar a fábrica y no nos dan ninguna tarea”, indicó.

Entre los empleados despedidos, la mayoría tiene una antigüedad promedio de diez años. “Hay empleados con más de 35 años de servicio y otros con menos de uno”, agrego Ayala.

El delegado denunció que el Ministerio de Trabajo bonaerense “está buscando el desgaste” ya que decretó un período de conciliación de apenas cinco días y no convocó a ninguna mesa de diálogo. “No podemos solucionar nada en ese tiempo y no está abierto ningún canal de comunicación. No propusieron nada”, explicó.

 

Despidos en el Hospital Posadas

Trabajadores de la salud del Hospital Posadas cumplen un paro de 24 horas y otras acciones de protesta por el despido de 122 empleados, la mayoría afiliados a la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud bonaerense (Cicop) o a la Federación Sindical de Trabajadores de la Salud de la República Argentina (Fesprosa).

 

 

La medida de fuerza es acompañada por una jornada nacional de lucha en los 600 hospitales del país.

Los delegados de los gremios aguardan a ser recibidos por las autoridades del hospital público nacional, ubicado en la localidad bonaerense de El Palomar.

Reclaman la reincorporación de los trabajadores.

Esta mañana hicieron una marcha sobre la colectora de Acceso Oeste, que fue frenada por un cordón de efectivos de Gendarmería, que cortaba el paso.