La exposición “Edgardo Giménez. Holidays” reúne grandes esculturas, pinturas y serigrafías inéditas de Edgardo Giménez, emblemático artista visual que en los 60 integró la vanguardia del mítico Instituto Di Tella, y que desde este jueves podrán verse en la galería María Calcaterra.
La exposición, abierta hasta mediados de mayo en avenida Figueroa Alcorta 3032 (CABA), “está cargada de buen humor” según expresó el artista. “Eso quiere decir que cuando las obras entran a un lugar lo cambian, y que la gente está seria hasta que llega a este lugar, y frente a las obras se les despierta una sonrisa” continuó.
Esculturas en madera que superan los dos metros y medio, serigrafías bucólicas y acrílicos donde se alternan saltamontes, hipopótamos, pirámides y rayos “hechos no de manera realista, pero muy ligadas a la realidad”, forman parte de la obra reciente, cerca de 20 piezas, que Giménez (Santa Fe, 1942) eligió para “Holidays”.
El hilo conductor de la exposición es “el estilo y su significado profundo” y enfatiza: “Estamos acá para pasarla bien, la vida es corta y, como diría Tita Merello, pasarla a té de tilo, preocupado y con estrilo (enojo en lunfardo) me parece atroz”.
“Todas estas piezas tienen como fin llevar alegría adonde estén, un objetivo bastante original y de vanguardia, teniendo en cuenta que eso es lo que más le falta en el planeta. La gente está tensa, angustiada y desesperada todo el tiempo y, dar una recorrida por esta exhibición sería como darse un año de descanso, armonía y diversión”, bromea Giménez.
La única pieza que el artista había exhibido antes es el díptico “Llamado divino”, que en palabras del artista es “una especie de mural realizado en 1968, de 2,40 metros por 2,60, en el cual se perfila una cosa de color y de gracia que permite convivir amablemente con él. Quiero mucho lo que hago y volver a visitarlo me da mucho placer, el significado y la alegría es exactamente la misma que cuando lo creé”.
“Cada obra que hice en mi vida fue en momentos en que estoy bien, divertido y con ganas. Eso es importante porque se imprime en ellas y las piezas aquí expuestas están inmersas en algo festivo. G.K. Chesterton decía que divertido no es lo contrario de serio, sino de aburrido”, resume sobre la exposición que podrá visitarse de lunes a viernes de 14 a 19 hs.
Autodidacta con vocación y talento fuera de lo común, Giménez comenzó a trabajar a los 13 años en una agencia de publicidad en Santa Fe, de donde es oriundo, y en los años 60 se vinculó con el Instituto Di Tella, donde no tardó en convertirse en uno de los artistas predilectos de Jorge Romero Brest.
Artista gráfico, escultor, dibujante y pintor, realizó escenografías para cine y teatro y diseñó casas como su refugio y taller de la localidad bonaerense de Punta Indio, y la residencia de Brest en City Bell, cuyos planos integraron la muestra de arquitectura contemporánea del MOMA en Nueva York.
arsovia en 1996, el Premio Cóndor de Plata a la mejor escenografía por “Los neuróticos” en 1973 y el Premio Leonardo a la Trayectoria del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) en 1997.
El arte, para Giménez, “sirve para vivir mejor. Las cosas más importantes siempre pasan a través de los creadores, los artistas son la gente que te salva, aunque haya que tener mucho cuidado de no llamar demasiado la atención: mirá lo que le pasó a Jesús”.
El autor del afiche publicitario “¿Por qué son tan geniales” que en 1965 sorprendía a los paseantes en la calle Florida y de la imponente escenografía del filme “Los neuróticos” que millones de personas vieron en el Museo MAR, considera que “el arte pop vino a a salvar el mundo y está más vivo que nunca”.
“De fácil acceso, el arte pop es directo y no precisa preparación previa para entenderse: lo que uno está mirando es eso que tiene enfrente. Algo de eso creo que ocurrió en Mar del Plata, donde tres millones de personas vieron la muestra”.
Este creador multifacético fue, además, director de arte del Teatro San Martín, institución para la cual diseñó una colección de afiches legendaria y fue reconocido, entre otros, con el Premio de Honor de la Bienal del Afiche de V
¿Cómo ve la escena artística actual? “Jorge Luis Borges decía que es muy difícil triunfar en estas provincias… -ironiza-. No lo olvidemos. Pero los artistas somos insistentes. Cuando estamos convencidos de algo no paramos y ese algo puede convertirse en realidad”.
Probablemente sea esa insistencia la que a partir del 28 de abril lo lleve al Museo de Arte Tigre (MAT) con una gran muestra que repasará su carrera y presentará nuevas obras, titulada “Los sueños se hacen realidad”, en referencia al mundo creado por Walt Disney.
“Disney -resume- fue mí gran detonante de imaginación y locura durante la infancia, luego Hollywood fue mi salvación junto a Federico Fellini, porque fue con ‘Ocho y medio’ que descubrí que el drama sin humor es insoportable. Mirar las cosas como en una tragedia griega es complicado, hay que tener una energía especial. El humor es fundamental para vivir y por eso lo es para mi obra”.
(Con información de Télam)
