Arcor y Bagó se unen para producir suplementos dietarios

Las barritas de cereal y los potes serán de venta libre y podrán comprarse en farmacias,

Dos multinacionales argentinas, la alimenticia Arcor y la farmacéutica Bagó, presentaron hoy una línea de suplementos dietarios con una inversión de 90 millones de pesos.

El anuncio de la producción se realizó hoy en un hotel céntrico al que asistieron representantes de ambas familias titulares de las empresas, entre ellos, Luis Pagani, presidente de Arcor, y Juan Pablo y Sebastián Bagó, por el laboratorio que lleva el apellido familiar. Es la primera vez que ambas compañías se unen para lanzar un producto que les insumió tres años de desarrollo y que se elabora en tres plantas de Arcor, una en la localidad de Recreo, en Catamarca, y las otras dos en Colonia Coroya y Arroyito, en Córdoba.

Los suplementos dietarios serán de venta libre y serán lanzados en abril en farmacias, aunque se contempla la posibilidad de comercializarlos en el futuro en supermercados. Los productos están destinados a adultos sanos y se trata de una nueva categoría de suplemento técnicamente denominados “nutraséuticos” por sus calidades nutritivas.

La presentación se realizó en una escenografía que simulaba un living, conducida por por el periodista Luis Novaresio. Sebastián Bagó señaló que la inversión conjunta de las dos empresas “fue sin aversión al riesgo, porque no nos asustan las subidas y bajadas” de la economía argentina, porque finalmente “pasan”.

En tanto José Luis Bagó sostuvo que los suplementos dietarios están orientados a la “prevención y no a la curación” y aseguró que apuntan a lograr “una vida más sana”. Luis Pagani habló de un “consumidor exigente” y pronosticó que en los próximos diez años “cambiarán los productos” de consumo masivo “y el retail” en general.

El responsable de márketing de Arcor, Marcelo Siano y el responsable del proyecto por Bagó, Luis de la Fuente, explicaron que los suplementos dietarios no reemplazan la ingesta de comida y aclararon que no se venderán en quioscos, ya que no son golosinas.

Los productos se comercializarán a través de la distribuidora farmacéutica Disprofarma en todo el país, con expectativa de exportar a países limítrofes y al resto del mundo, agregaron.

En el primer año de comercialización se estima que se venderán un millón de unidades entre los potes y las barritas. Estos tipos de suplementos dietarios no existían en la Argentina, de ahí que se los denomina como una nueva categoría.

(Con información de Télam)