En coincidencia con la sesión especial convocada para debatir los proyectos sobre las subas de tarifas, los panaderos de la provincia de Buenos Aires realizan una protesta en frente al Congreso.
El reclamo consiste en la entrega de pan a los transeúntes, debido a la caída de las ventas y al aumento de los costos.
El “panazo” se resolvió luego de que el Centro de Industriales Panaderos del Oeste (CIPO) denunciara que los aumentos en las tarifas alcanzaron el 1.490 por ciento en el servicio eléctrico, de 1.297 por ciento en el gas y el 996 por ciento en el agua. También recordó las subas “indiscriminadas” en las materias primas.
“La bolsa de harina de 50 kilos tuvo un incremento del 50 por ciento entre enero y abril”, precisó la cámara que agrupa a algunas panaderías, en un comunicado.
La Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM) y la Federación Industrial Panaderil de la provincia de Buenos Aires adelantó una nueva suba para los próximos días, como consecuencia de los incremento de las tarifas y la especulación de nuevas subas en el harina por el precio internacional del trigo.
La Cámara de Industriales Panaderos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se opuso a la protesta de los panaderos bonaerenses.
“Repudiamos toda actitud que perjudique a los industriales panaderos de la Capital Federal de esa zona y alrededores ya que, de realizarse esta medida, pondría en riesgo los mostradores y su credibilidad”, expresó ayer José Álvarez, presidente de la entidad, que propuso una mesa de diálogo entre la Federación Molinera, los intendentes, jefes de gobierno y el Ejecutivo Nacional.
(Con información de Télam)
