El Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) pidió, al comienzo de la sesión especial en la Cámara de Diputados, tratar una “declaración de rechazo” al endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La iniciativa fracasó por 66 votos a favor, 113 en contra y 45 abstenciones.
“No podemos estar en esta sesión sin debatir alrededor de esta situación”, comenzó el diputado nacional del FIT, Nicolás Del Caño.
El legislador advirtió que un eventual acurdo del financiamiento con el FMI “significará mayores ajustes y penurias para el pueblo trabajador”. Del Caño aseguró que el organismo pedirá a cambio “la reforma laboral, elevar la edad jubilatoria, bajar los salarios, achicar el Estado con mayores despidos”.
“No significa dinero para construir escuelas, hospitales o generar empleo”, manifestó, para defender el proyecto de declaración de rechazo, que no estaba previsto en la orden del día.
La presidenta del bloque del Frente Renovador, Graciela Camaño, anunció la abstención de su bancada y la justificó en lo preliminar del estado de las negociaciones con el FMI. “No pienso mandar a nuestro bloque a votar por una llamada telefónica que el presidente y el ministro de Economía hicieron ayer”, sostuvo.
La diputada Carla Carrizo, de Evolución Radical, y el presidente del interbloque Argentina Federal, Pablo Kosiner también se abstuvieron.
“Estamos dispuestos a debatir este tema el día que venga el Gobierno a plantear cuál es el acuerdo que van a firmar con el Fondo. Mientras tanto, no tiene sentido, más allá de la importancia”, apuntó Kosiner. “Es un debate con mucha profundidad y que estamos dispuestos a darlo”, agregó.
La diputada nacional por San Luis Ivana Bianchi se manifestó a favor de la declaración de rechazo. “Creemos que a pesar de que hay una llamada telefónica, también hay un viaje”, sentenció y pidió conocer las “condiciones y formas” del posible acuerdo.