En 2017 se relevaron 251 “víctimas directas” de femicidios en todo el país, según el “Resumen del Informe del Registro de Femicidios de la Justicia Argentina”, realizado por la Corte Suprema. “Esta cifra proviene del relevamiento de causas judiciales que se iniciaron entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2017 en las 23 jurisdicciones provinciales y en la Ciudad de Buenos Aires”, aclara el informe difundido hoy por el Centro de Información Judicial (CIJ).
La cifra asciende a 273 femicidios si se suman los homicidios contra mujeres y muejeres trans “vinculados” y “vinculados por interposición en línea de fuego”. “Se han contabilizado 22 víctimas de femicidios vinculados. Estas dos cifras integran el total de 273 víctimas letales de la violencia de género de la República Argentina”, indica el informe la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Estas dos categorías se sumaron para contabilizar los homicidios cometidos contra una o varias personas, sus hijos por ejemplo, “con el fin de causarle sufrimiento a una mujer, mujer trans o travesti” o de las personas que “se interponen para evitar un femicidio”.
“Estas incorporaciones persiguen el objetivo de visibilizar integralmente los efectos letales de la violencia de género”, explicó el resumen del “Registro de Femicidios” del año pasado.
“La tasa del país es 1, 1 femicidios cada 100 mil mujeres, igual a la del año 2016”, resume el análisis de la Corte Suprema.
El informe de la Justicia se difundió entre las marcha de “Ni una menos” que se realizaron ayer y la que se hará esta tarde. La manifestación se inició en 2015, para reclamar contra la violencia de género. Este año también se sumó el pedido por la legalización del aborto, que el miércoles 13 de junio será tratada en la Cámara de Diputados.
Las provincias con mayor tasa de femicidios son Salta, Jujuy y Santiago del Estero, en ese orden, con entre dos y tres asesinatos por violencia de género cada 100.000 mujeres. Le siguen Catamarca, Formosa, Santa Fe, Córdoba, Tierra del Fuego, Neuquén, San Luis, Chaco, provincia de Buenos Aires y Corrientes, con entre uno y dos femicidos cada 100.000 mujeres. La Pampa y Río Negro no registran casos, por lo menos judicializados, y las demás jurisdicciones, incluida la Ciudad de Buenos Aires, tienen menos de un caso cada 100.000 mujeres.
“Esta heterogeneidad debe ser tenida en cuenta por el Estado a la hora de diseñar políticas de prevención en materia de violencia de género”, sugiere el informe del Máximo Tribunal.
El 93 por ciento de los imputados de las causas judiciales de todo el país fueron “varones con quienes las víctimas tenían un vínculo o conocimiento previo” y en casi el 60 por ciento de los casos “eran sus parejas y ex parejas”.
El 71 por ciento de los femicidios cometidos en 2017 se perpetraron en las viviendas de las víctimas. “Todos estos datos son cruciales para entender la especificidad de la violencia de género y del tipo de medidas que requiere su abordaje”, advirtió el informe de la Corte Suprema.
El registro de femicidios, basado en los casos judicializados, indica que “al menos 202 niñas, niños y adolescentes, menores de 18 años de edad, se encontraban a cargo del cuidado de las víctimas de femicidios”.
Por otro lado, al menos 21 femicidios fueron cometidos “en un contexto de violencia sexual” y que existieron “al menos 64 hechos previos de violencia entre víctimas y los imputados”, antes de llegar al asesinato.
En 33 casos medió una denuncia formal y en otros 31 hubo “otro tipo de actuaciones” que verificaron la violencia previa. La Corte Suprema prevé que esos porcentajes “seguramente sub-registra este fenómeno”.
El 62 por ciento de las causas judiciales iniciadas en 2017 “se encuentran en etapa de investigación”; un 5 por ciento de los casos tiene sentencia y un 18 por ciento ya fue elevada a juicio.
El 15 por ciento restante de las causas quedaron extinguidas por el suicidio u otro tipo de muerte del imputado.