La tercera jornada de exposiciones en el Senado sobre la legalización del aborto subió la temperatura del debate, con varios cruces entre los legisladores e invitados y fuertes declaraciones en contra de la Iglesia Católica.
María Eugenia Estenssoro, que reiteró que se realizó un aborto a los 21 años, cuestionó “los folletos que está repartiendo” la Iglesia en diversas escuelas “donde se adoctrina, porque están llenos de de mentiras científicas e históricas” y “les dicen a los chicos que los anticonceptivos no previenen el aborto, no ayudan a no quedar embarazadas cuando no lo desean”.
La tucumana Silvia Elías de Pérez, una de las abanderadas del rechazo a la legalización, le salió al cruce al señalar que se sintió “triste porque en lugar de hablar del proyecto ha hablado de la Iglesia Católica” cuando “es normal que una institución exprese su opinión”.
Por su parte, el periodista Obarrio sostuvo que “siempre que algo que es ilegal se convierte en legal, pasa a estar incentivado y promovido” y que el proyecto “crea un incentivo para que aumenten los abortos”, al tiempo que “no tiene en cuenta el derecho de los hombres, tanto que se habla de igualdad de género”.
Uno de los principales expositores de la jornada fue el prestigioso biólogo Alberto Kornblihtt, quien explicó que “el embrión y el feto no son seres independientes de la mujer gestante, sino que hasta el nacimiento son casi un órgano de la madre”.
El exsenador y convencional constituyente Eduardo Menem, en tanto, realizó una extensa ponencia en contra del proyecto, al que calificó como “muy malo, más allá de las distintas posiciones” porque “tiene mala calidad constitucional” y precisó que “no hace ninguna mención al Código Civil”.
“Han creado una nueva categoría de personas. Ahora tenemos los adultos, los menores, los adolescentes y los niños por nacer. Han creado el sujeto descartable, con menos de 14 semanas”, agregó el riojano.