El ministro de Energía, Javier Iguacel, admitió que las tarifas de electricidad y gas en Capital Federal y Gran Buenos Aires tendrán un nuevo aumento antes de fin de año.
Según el funcionario, el servicio de gas tendrá una suba de “no más del 25 por ciento” y la electricidad tendrá uno de “menos del 30 por ciento”.
“El único ajuste será por inflación”, dijo el ministro que reemplazó a Juan José Aranguren, en declaraciones televisivas consignadas por la agencia NA.
“Aún quedan ajustes por hacer. Ahora están llegando las facturas de gas, que son duras”, reconoció Iguacel.
El funcionario explicó que el gas y la electricidad “tienen tres componentes: el costo de la energía, el transporte y la distribución”.
“Transporte y distribución son contratos que se renegociaron en pesos y se ajustan en pesos, por inflación”, puntualizó. “Este gobierno no es que haya dolarizado a la energía. En realidad, la hiperdolarizó el kirchnerismo, que nos hizo ser dependientes de la energía externa y llegamos a gastar 6.000 millones de dólares por año para importar”, agregó.
Iguacel aseguró que “sólo” se va a tener que importar gas en invierno y “cada vez menos”. “Gracias a la inversión que se está haciendo, tenemos la oportunidad de salir de la necesidad de importar”, resaltó Iguacel. “Esperamos entonces que el precio baje considerablemente”, estimó.
En este sentido, el ministro de Energía indicó que, para el próximo invierno, el gobierno espera que no haya aumentos.
“Al bajar el precio de producción, apuntamos a que en el invierno que viene sea, en pesos, similar a la de este año”, dijo. “Después de dos años y medio de Gobierno, este año nos va a empezar a sobrar gas y vamos a poder exportar a Chile. Estuve en ese país hace pocos días y hablamos de esto”, concluyó.
