Vive la Liberté

Recreando la revolución francesa en nuestros tiempos, con libertad de acción

Obra escrita y dirigida por Joël Pommerat y co-dirigida por Anne de Amézaga “Todo saldrá bien” -que puede verse en el Teatro San Martín- tuvo estreno en septiembre de 2015 y desde entonces ofreció funciones en más de 40 ciudades francesas y también en otras como San Pablo, Amsterdam, Ottawa, Colonia (Alemania).

Una obra jugada cuya apuesta de cinco horas de duración se matiza con la libertad que tiene el público, de poder asistir y participar casi como si fuera un miembro más, de la asamblea de los Estados Generales convocada en 1789 por Luis XVI, y que fuera el ámbito que diera origen a la Declaración Universal de los Derechos del Hombre, la Revolución Francesa y la abolición de la monarquía.

Todo se mixtura, se sospecha, hasta que el código empieza a funcionar. Con una ruptura de la tradicional cuarta pared teatral, los actores mezclados en la platea con el público, desde donde a veces intervienen en la asamblea, aplaudidores que hacen las veces de partidarios de las distintas facciones que se expresan en el debate y el mismo público, que va tomando partido y también interviene con aplausos o comentarios en voz baja.

 

 

Para su creación la Compañía Louis Broulliard partió de dos preguntas: ¿Qué empuja a los hombres a derrocar el poder?, y ¿Qué relaciones nuevas se instauran entre los hombres y la sociedad, los ciudadanos y sus representantes? Si bien se entiende que esta históricamente situada en los albores de la revolución francesa, porque además el único personaje al que nomran es justamente a Luis XVI, puede definirse como atemporal, siendo que no está ambientada de época y el conflicto socio-político que plantea es perfectamente trasladable a la actualidad y a cualquier otro tiempo y lugar donde se desarrolle la lucha de clases.

Los demás personajes creados por el autor para exponer las distintas ideas que chocan crudamente en el ámbito de la Asamblea Nacional conformada mayoritariamente por la burguesía y el campesinado entre Junio y Julio de 1789 y que originalmente tuviera como propósito representar los intereses del pueblo sin atentar contra la monarquía ni cuestionar su poder dentro de la mayor crisis política y económica de su historia.

 

 

 

Con una buena puesta en escena y muy buenas actuaciones de los 14 actores y actrices franceses que forman la compañía y un muy buen aporte de 20 “no-actores” francófonos residentes en Argentina, las casi 5 horas de duración no resultan para nada tediosas sino más bien dinámicas y con altos momentos de tensión que nos mantienen en vilo y atentos al conflicto de principio a fin.

“Todo saldrá bien” es, antes que nada, una reflexión sobre el dispositivo político, el discurso, la conformación del poder y la construcción ideológica, a partir de uno de los acontecimientos centrales de la historia occidental.

Creada en 1990, la Compañía Louis Brouillard que dirige artísticamente Pommerat, ha realizado más de 15 puestas en asociación con distintos teatros franceses y europeos. El grupo teatral ya estuvo en Buenos Aires en 2004 con su segunda puesta, “Al mundo”, mientras que en la actualidad, gira al mismo tiempo con tres elencos y tres obras distintas, la más emblemática, una reescritura en clave moderna de “Caperucita roja”, que desde hace más de 10 años permanece en gira constante.

Esta semana es última de funciones en Buenos Aires dentro de su gira internacional.