Charly García cantó, tocó y gustó. Seguramente, el público que anoche copó el teatro Gran Rex quedó con ganas de más. No porque él y su banda hayan quedado a mitad de camino. Sucedió que, por el contrario, el hombre del bigote mitad blanco y mitad negro demostró que puede dirigir su orquesta, a los 66 años, con solidez y soltura, y llevar a quienes fueron a ver el show por un paseo musical sin fisuras durante dos horas.
El show “La torre de Tesla”, que se estrenó este año, había sido anunciado con apenas cuatro días de antelación. Eso no impidió que las entradas volaran en cuestión de minutos. Al final, ayer un Gran Rex colmado fue el lugar en donde se dio uno de los shows del año.
Se trató de un recital en el que García recorrió 25 canciones, en su mayoría, de su historia como solista. El ex Sui Generis estuvo acompañado, vale decirlo, por una banda de músicos que no desentona: Rosario Ortega (voz), Fabián “el Zorrito” Von Quintieros (teclados), Kiuge Hayashida (guitarra), Toño Silva (batería) y Carlos González (bajo) le dieron a las canciones de García una interpretación perfecta.
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— jose palazzo (@josedpalazzo) August 29, 2018
De su último disco, Random, sonaron “La máquina de ser feliz”, “Otro”, “Lluvia” y “Rivalidad”. “El aguante”, “Asesíname”, “In The City That Never Sleeps”, “King King”, “Shisyastawuman”, “Cerca de la revolución”, “Fax U”; “Reloj de plastilina”, “Influencia”, también formaron parte del repertorio.
En la pantalla, en el fondo del escenario, se sucedían imágenes de películas como King Kong, 2001, Psicosis y Toro salvaje; Mercedes Sosa (en el momento en que tocaron “Cuchillos”) y claro, la Torre de Tesla.
Hubo tiempo, además, para una sorpresa, cuando el ex Serú Girán, David Lebón, apareció en el escenario. Con él, García tocó “No llores por mí Argentina” y “Peperina”. “Te quiero mucho”, le dijo Lebón a su anfitrión, para emoción de los presentes.
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Antes de “Rezo por vos”, recordó a Spinetta, y pidió “un brindis” por “el Flaco”. Con “Promesas sobre el bidet”, García y la banda se retiraron. Fue entonces el momento del público: durante 20 minutos se escucharon insultos contra el Presidente (“Mauricio Macri la puta que te parió”) y “Aborto legal en el hospital”. Después, García y compañía volvieron a escena. Con “Los dinosaurios” y “Pasajera en trance”, el músico se despidió de la multitud (3.300 personas) que ayer volvieron a confirmar que García es una figura del rock nacional que no se puede esquivar y que aún tiene mucho para dar. Lo que viene: Rosario, el 5 de septiembre. Las cita ya tiene entradas ya agotadas.