En Mendoza, donde inauguró la base del Escuadrón Núcleo de Gendarmería Nacional en esa provincia, el presidente Mauricio Macri sostuvo que los convenios con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y con los gobernadores proyectará “tranquilidad” al sector financiero. No obstante, no descartó nuevas corridas del mercado ni “una séptima tormenta del mundo”.
“El nuevo acuerdo con el Fondo y el Presupuesto nos va a permitir dar tranquilidad, que se recupere el crédito para le sector privado y poner en marcha la inversión. Hay gente que está actuando con responsabilidad”, destacó el mandatario, en una conferencia de prensa, junto al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo.
De todas formas, Macri advirtió que la calma que mostró el mercado en los últimos tres días, todavía no
“No porque tengamos tres días consecutivos de tranquilidad en los mercados, significa que se hayan resuelto los problemas estructurales”, sostuvo.
“No podemos vivir más de prestado, con un Estado que gasta más de lo que tiene. Eso genera inflación, que es lo que más castiga a los argentinos. Estamos decididos a hacerlo, ahora hay que hacerlo”, agregó el mandatario.
Macri no descartó nuevas crisis mundiales que exacerben la vulnerabilidades de la economía argentina.
“No sabemos si no va a venir una séptima tormenta del mundo. Lo que hay que hacer es trabajar para resolver esos problemas estructurales que hemos heredado. No somos víctimas de nadie, esto tiene que ver con nuestra responsabilidad”, explicó.
El presidente no se atrevió a estimar el valor en el que se estabilizará el dólar.
“Creemos que el tipo de cambio que tenemos es sumamente competitivo, pero nadie ha fijado el rango que tenemos es competitivo, nadie ha fijado el rango, no nos fijemos en los números. Un acuerdo con el FMI da certidumbre, junto a un presupuesto ordenado. La devaluación genera más inflación, pero somos optimistas y el año que viene, estabilizando las cosas, vamos a tener una inflación más baja”, auguró.
“Estamos todavía asumiendo la cantidad de situaciones que hemos vivido desde abril. Vamos a retomar la línea de crecimiento. Lo que tenemos que hacer es acompañar a aquellos que más lo necesitan en esta transición. Argentina va a arrancar de vuelta”, agregó Macri.
El jefe de Estado admitió que la crisis iniciada en abril significó “un golpe”, pero volvió a mostrarse optimista sobre las señales proyectadas al mundo y el futuro de la economía argentina.
“Todos estos meses nos han significado un golpe, teníamos más crecimiento e inversión. De repente, se cerró financiamiento a los mercados emergentes y eso generó devaluación, problemas en la cadena de pagos. Es un proceso de transición el que estamos pasando. Pero esta vez dijimos `vamos a sostener el rumbo y a darle previsibilidad a lo que estamos haciendo´. Pero estamos sufriendo lo que vino de afuera y nuestros problemas estructurales. Si resolvemos esto, va a ser un cambio fundamental, dejando atrás 70 años”, sostuvo.