Mientras en su país es investigado por interferir con la justicia, Donald Trump desvía la atención hacia Corea del Norte y volvió a hacer amenazas contra el régimen de Kim Jong-un.
Después de otro lanzamiento de un misil intercontinental, Trump volvió a cargar contra el régimen norcoreano durante una visita a la ciudad de Varsovia, en Polonia. “Tenemos que demostrar públicamente que su mal comportamiento tendrá consecuencias”, dijo el mandatario estadounidense en una conferencia de prensa tras reunirse con su par polaco, Andrzej Duda. “Lo afrontaremos con gran decisión”, agregó el magnate, y señaló que su país estudia medidas “severas” contra Pionyang.
Trump consideró que el comportamiento de Corea del Norte es “vergonzoso” y que actúa de forma “muy peligrosa y hay que hacer algo al respecto”.
“Llamo a todas las naciones a afrontar esta amenaza global y a demostrar públicamente a Corea del Norte que hay consecuencias a su muy, muy mal comportamiento”, insistió el presidente norteamericano, en la previa de su viaje al G-20, en Hamburgo.
Sin embargo, y como es habitual, Trump también se expresó sobre el tema en la red social Twitter, en donde también apuntó contra China.
“El comercio entre China y Corea del Norte creció casi un 40% en el primer trimestre. Menos mal que iban a trabajar con nosotros, pero ¡al menos teníamos que intentarlo!”
Trade between China and North Korea grew almost 40% in the first quarter. So much for China working with us – but we had to give it a try!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 5, 2017
Ante estas declaraciones, el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Geng Shuang, trató de llevar un poco de tranquilidad, en medio de acusaciones cruzadas, y convocó “a todas las partes a mantener la calma evitando discursos y acciones susceptibles de empeorar las tensiones”.
“El mantenimiento de la paz y la estabilidad en la península es útil para los intereses comunes de todas las partes”, recordó Shuang.
