Centenares de manifestantes en varias ciudades de Estados Unidos reclamaron anoche al gobierno del presidente Donald Trump que mantenga la investigación sobre la trama rusa que lidera el fiscal especial Robert Mueller.
El despido del hasta ahora fiscal general, Jeff Sessions, y el nombramiento provisional en su lugar de Matthew Whitaker, crítico con Mueller y la investigación, ha hecho temer que el Departamento de Justicia cumpla finalmente con el deseo de Trump de cerrar la investigación.
En Washington cientos de personas protestaron con velas en el parque de Lafayyete, frente a la Casa Blanca, al grito de “nadie está por encima de la ley” y “Whitaker debe inhibirse”. Los manifestantes tenían un altavoz tan potente que estas consignas se oyeron desde el ala oeste de la Casa Blanca. En uno de los carteles de la marcha ponía “tre45son”, un juego de palabras entre “treason” (traición en inglés) y el número 45 en alusión a la Presidencia de Trump, informó la agencia de noticias EFE.
Una de las marchas más numerosas del país fue en Nueva York, donde centenares de personas se agruparon en Times Square. El llamado nacional de varias plataformas y organizaciones también tuvo eco en Oakland, Boston, Chicago, Charlottsville, Chattanooga, Louisville u Orlando, entre muchas otras urbes.
Trump despidió a Sessions esta semana tras meses de tensión. El presidente nunca le perdonó que se apartara de todo lo relacionado con la investigación de la trama rusa debido a sus contactos con Moscú durante la campaña presidencial.
El mandatario nombró a Whitaker y le concedió la autoridad para supervisar las pesquisas del fiscal especial Mueller, arrebatándosela al vicefiscal general, Rod Rosenstein, quien tenía esa responsabilidad desde hace un año y medio.
El año pasado, Whitaker opinó en la cadena CNN que Mueller estaba “peligrosamente cerca de cruzar” una “línea roja”, en referencia a su indagación, que llamó “ridícula” sobre los posibles lazos financieros de Trump con Rusia, y se mostró a favor de limitarla. Eso despierta temores de que, ahora que está al frente de la investigación de Mueller, pueda limitar su alcance o recortar su presupuesto.
(Télam)