Una miniserie televisiva británica que trata sin espectacularidad y con delicadeza la historia de un niño de once años transgénero, se convirtió en un éxito de audiencia En Gran Bretaña.Se trata de “Butterfly” (Mariposa), escrita por Tony Marchant, ganador de un premio Bafta y dirigida por Anthony Byrne.
El drama relata la compleja relación que vive una pareja divorciada, Vicky (Anna Friel, ganadora de un Emmy por “limitless e Goal!”) y Stephen (Emmett J. Scanlan, “The Fall”) para afrontar el pedido de cambio de sexo por parte de su hijo menor, Max (Callum Booth Ford). El conflicto central entre los padres es que si bien ambos quieren proteger a Maxine, tienen ideas completamente distintas de cómo concretarlo.
Stephen sigue aferrado a la idea que el hijo atraviesa una crisis pasajera, mientras que para Vicky lo que importa es que Maxine se sienta bien físicamente y mentalmente, más allá de todos los problemas.
Desde muy pequeño Max siempre se sintió una niña atrapada en un cuerpo masculino. Y su deseo de transformarse en Maxine es algo frente a lo cual sus padres no pueden fingir que nada sucede. Ambos, por lo tanto, deberán campear una situación cada vez más delicada, que los llevará a encontrarse con todas las consecuencias de una elección que necesita primero de una aceptación en casa y luego de parte de la sociedad.
El director aborda el tema de manera potente y realista, colocando en escena a una familia creíble y amorosa a pesar de las dificultades. Eso permite identificarse con los personajes y también preguntarse cómo reaccionaría uno frente a una situación similar, señalo un despacho de la agencia ANSA.
(Fuente Telam)