Con el objetivo de conocer los planes de la Casa Blanca respecto a la situación en Venezuela, el presidente Mauricio Macri envió al secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, a Washington para mantener una serie de reuniones con autoridades del Gobierno estadounidense, así como también de la OEA.
El líder del PRO es uno de los principales críticos del cuestionado mandatario venezolano, Nicolás Maduro, y desde sus tiempos en la Jefatura de Gobierno arremetió contra las autoridades del país caribeños.
A partir de la llegada a la Casa Rosada, el jefe de Estado ratificó y redobló esa postura, incluso llevando el tema a las cumbres del G20, además de otros foros internacionales.
Durante las escasas horas, el secretario de Asuntos Estratégicos mantuvo un encuentro con el director principal de Asuntos del Hemisferio Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional, Mauricio Claver-Carone.
El asesor de Trump explicó la postura de la Casa Blanca y manifestó que no descartan profundizar las sanciones contra Venezuela, que podrían alcanzar al sector del petróleo, el oro y casi cualquier intercambio comercial: sólo se aceptarán aquellas transacciones que tengan el visto bueno de Guaidó y la Asamblea Nacional.