El presidente interino de Venezuela proclamado por la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, presentó el programa económico para un eventual gobierno de transición y propuso dar apertura a la inversión privada en las empresas públicas y solicitar financiación en entidades internacionales.
Expertos económicos y diputados del parlamento, controlado por el antichavismo, elaboraron el llamado Plan País como el programa económico que debería seguir el gobierno que surja de una eventual caída del presidente Nicolás Maduro, la opción que hoy apoyan con fuerza Estados Unidos, Brasil, Argentina, varias potencias europeas y casi la mitad del continente americano.
En paralelo, impulsarán una refinanciación del Estado que, según Guaidó, debe ser masiva e incluir una “reestructuración profunda de la deuda pública externa“, hoy estrictamente vinculada a acuerdos con los aliados externos del gobierno de Maduro: China y Rusia.
“Este plan no busca apretar en un país en el que 65 de la población perdió en promedio 10 kilos”, aclaró Guaidó frente a un auditorio lleno de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Central de Venezuela, en Caracas, según la agencia de noticias EFE.
“A China y Rusia también les conviene un cambio de Gobierno”, agregó Guaidó, un férreo aliado de Estados Unidos, y prometió seguridad jurídica para todas las empresas que operan en el país, incluso las chinas y las rusas.
(Con información de Telam)