El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, anunció hoy que España anticipará la fecha de elecciones para el 28 de abril, luego de sufrir una derrota parlamentaria que lo dejó sin respaldo en un momento convulsionado del país, que se debate entre la reclamo secesionista de Cataluña y el auge de la ultraderecha.
Al líder socialista, que gobierna con una minoría de 84 diputados desde junio del año pasado, no le quedó otra salida que anticipar los comicios.
El adelanto electoral se precipitó debido a que los partidos independentistas y de la derecha, el Partido Popular (PP) y Ciudadanos, no aprobaron el presupuesto del gobierno socialista en el Congreso de los Diputados, la bandera con la que Sánchez defendía el carácter progresista de su Ejecutivo.
“Sin presupuestos uno no puede gobernar”, dijo Sánchez, en una conferencia de prensa en el Palacio de La Moncloa, sede del Ejecutivo de Madrid.
“España no tiene un minuto que perder, tiene que avanzar, emplear todas las energías. Entre no hacer nada y continuar sin presupuesto o convocar elecciones, elijo lo segundo”, agregó, luego de la extrema debilidad en la que quedó sumido.
“Hay derrotas parlamentarias que son victorias sociales. La ciudadanía ha visto lo que este gobierno quiere para este país”, dijo Sánchez, en la conferencia de prensa donde anunció la fecha de elecciones. “La derecha defiende un tipo de España en la que solo caben ellos, nosotros defendemos una España inclusiva, en la que caben todos, y ese es el debate”, agregó.
Sánchez está al frente del gobierno español desde el 2 de junio del año pasado, tras haber ganado la primera moción de censura exitosa de la historia democrática de España, que desalojó del Ejecutivo al ex presidente Mariano Rajoy, del Partido Popular (PP), luego de que recibiera una condena por corrupción.
Los partidos independentistas, que apoyaron la llegada de Sánchez al poder, venían amenazando con darle la espalda en busca de algún gesto hacia los 12 referentes políticos detenidos, que esta semana empezaron a ser juzgados en el Tribunal Supremo por rebelión, como consecuencia del fallido intento de secesión en 2017.
Los socialistas lideran los sondeos, pero los tres partidos de la derecha, PP, Ciudadanos y Vox, en crece, sumarían mayoría.
Vox es contrario a la inmigración, enemigo de los secesionistas y de las feministas e irrumpió en las elecciones regionales de Andalucía, en diciembre último.
“Se vuelve a demostrar que España será ingobernable mientras no afronte el problema político de Cataluña”, concluyó la vocera del gobierno catalán, Elsa Artadi.
(Con información de Télam)