Un día como hoy pero hace 83 años nacía en la ciudad peruana de Arequipa un futuro Premio Nobel. Jorge Mario Pedro Vargas Llosa, conocido popularmente como Mario Vargas Llosa, se convertiría en una de las voces más emblemáticas de la literatura latinoamericana.
El autor, quien está de visita en nuestro país para participar del Congreso Internacional de la Lengua Española, saltó a la fama en la década del 60 con su ya clásica novela “La ciudad y los perros” por la que recibiría dos importantes galardones: el Premio Biblioteca Breve y el Premio de la Crítica de España.
Mas esta no fue su primera publicación. Su debut literario fue con una colección de relatos titulada “Los jefes” en 1959, obra que fue reeditada hace algunos meses en nuestro país.
Si hay algo que caracteriza a la literatura por estas latitudes es que cada autor sabe imprimirle su propio estilo a cada creación. Basta leer un simple fragmento perdido para identificar claramente a quien lo escribe. Y Mario Vargas Llosa no es la excepción. De hecho, una de sus marcas personales más destacadas es la manera en la que experimenta con distintos aspectos de la técnica narrativa.
De esta manera, Vargas Llosa se erige como un maestro de la experimentación en la literatura tanto en la composición como en la narración. Si bien ha vivido gran parte de su vida fuera de su Perú natal, alternando entre Gran Bretaña, España y Francia, aquel país está presente, de alguna manera u otra en buena parte de sus obras.
Presente también están las distintas problemáticas que aquejan a los países de nuestra región. Es con su obra “Pantaleón y las visitadoras” que se abre la etapa signada por una visión más crítica de la sociedad latinoamericana y los problemas por los que atraviesa.
Desde finales de los setenta, además, su reflexión como narrador aborda especialmente la relación entre lo real y su trasposición literaria. La “verdad de las mentiras“, como la llama el propio Vargas Llosa o la constatación de que la palabra crea un mundo propio que se parece a la realidad externa, pero que tiene sus propias reglas y “verdades”.
Escritor multipremiado y multifacético, dueño de un estilo propio y singular, Vargas Llosa es sin duda una de las voces más influyentes de las letras latinoamericanas desde hace varias décadas.
Vargas Llosa se coronó con el máximo galardón que puede recibir un escritor, el Premio Nobel, en al año 2010. No ganó por ninguna obra en concreto sino más bien por su trayectoria, “por su cartografía de las estructuras del poder y sus imágenes de la resistencia, rebelión y derrota del enemigo“, así lo expresa el fallo que lo coronó ganador.
“Lo que hago, lo que digo, expresa el país en el que he nacido“, manifiesta el escritor, “el país en el que he vivido, las experiencias fundamentales que marcan a un ser humano, que son las de infancia y juventud, de tal manera que el Perú soy yo. Yo le puedo agradecer a mi país, a lo que yo soy, el ser un escritor“.
El lector puede considerarse afortunado de ser contemporáneo de una de las voces más influyentes de la historia de la literatura latinoamericana. “Cinco esquinas”, editado por Alfaguara en 2016, es su última publicación hasta el momento.
¡Feliz cumpleaños maestro!