La obra ganadora del Premio Alfaguara de Novela 2019, “Mañana tendremos otros nombres” escrita por el autor argentino Patricio Pron indaga en el amor en los tiempos de redes sociales.
, unos meses después de que se coronara ganadora del prestigioso certamen.
“Mañana tendremos otros nombres” es la novela en la que Patricio Pron reflexiona sobre las formas que adquieren las relaciones amorosas en un presente atravesado por redes sociales, nuevos contratos a la hora de conformar una pareja, y preguntas acerca de cómo llevar adelante proyectos de paternidad y maternidad.
La obra ha cosechado grandes elogios. El presidente del Premio Alfaguara 2019, el escritor Juan José Millás, califica a la obra de Pron como una “novela excelente que quizá el tiempo convierta en una obra maestra“. El escritor español Manuel Vilas, por su parte, afirmó “esta novela es la afilada historia de una ruptura amorosa celebrada en el corazón del capitalismo actual”.
Pron explicó en conversación con Télam que todos sus libros tienen un proceso de investigación que los antecede. Para este proyecto, Pron confesó que se valió de lecturas de Eva Illouz, Vivian Gornick, Marina Garcés y, sobre todo, “Teoría King Kong” de Virginie Despentes.
“La propia perplejidad ante determinados desarrollos en los que uno no sabe muy bien cómo insertarse“, fue el disparador que movilizó esta historia cuenta su autor. “También la experiencia de amigos que en los últimos años han terminado relaciones amorosas de cierta duración y se encontraban totalmente perplejos ante un mercado de la soltería que había cambiado por completo. Además muchas amigas me contaban acerca de sus prácticas en Tinder y me hicieron cómplice de sus perplejidades e indignaciones“.
El autor, que desde hace unos años vive en España, se encontró ante situaciones que lo llevaron a preguntarse por “el valor de la vida humana en un momento en el que es tan fácil eliminar a alguien de tu vida deslizando los dedos en una pantalla. Me pregunté qué estaba diciendo acerca de nosotros el hecho de que hubiésemos otorgado la potestad de algo tan importante, como nuestra vida amorosa y sexual, a un algoritmo. Me interesa qué lleva a alguien a escoger o rechazar a otro, que puede ser la persona con la que pasarás el resto de tu vida o un rato, a partir de un elemento tan trivial como la fotografía o una frase. Todo eso me generó un interés relativamente nuevo en la experiencia amorosa, que nunca había sido el objeto principal de un libro. Me puse a leer novelas contemporáneas en español y descubrí que había un desfase temporal entre la forma en la que la experiencia amorosa era representada y la forma en la que las personas estaban viviendo esas experiencias amorosas“.
Los personajes de esta historia “descubren que incluso en la toma de decisión de permanecer en el centro de una metrópoli, como es Madrid y como puede ser Buenos Aires, hay un proyecto político, un repensarse como sujetos y como parte de relaciones y familias que no se corresponden con los valores tradicionales. Esto los lleva a admitir que, en cada pequeño paso que dan hay mucho de acción política entendida como la forma en la que un sujeto se enfrenta a la sociedad en la que vive. Tienen la enorme generosidad de darle al otro y a sí mismos la posibilidad de pensar si lo que desean es lo que tienen o si hay algo más, y lo que descubren es que hay personas que están en la misma situación, que están proponiendo nuevas formas de relaciones amorosas. Hace unos años la única forma amorosa posible era que dos personas se encuentren más o menos azarosamente y resuelvan sus problemas para tener una relación monógama a largo plazo. En cambio, Él y Ella se ven obligados a pensar qué cosas les sirven para conformar ese proyecto que tendrá otro nombre y les dará otros nombres a ellos”.
FICHA TÉCNICA:
Título: “Mañana tendremos otros nombres”
Autor: Patricio Pron
Sinopsis: Viven en Madrid, en la actualidad. Ella es arquitecta, tiene miedo a hacer proyectos de futuro y busca algo que no puede definir. Él escribe ensayos, lleva cuatro años a su lado y nunca pensó en verse soltero de nuevo, en un «mercado» sentimental del que lo desconoce todo.
Por las grietas de su derrumbe como pareja entran las amistades, sus consejos y sus vidas, la mayoría de las veces con más dudas que certezas. Es la generación Tinder, la de unas personas que eliminan a otras con un dedo; una generación en la que todos están expuestos y a la postre desencantados. La ruptura de una pareja también dice mucho de un país, de un momento, de una idea de convivencia. Y la radiografía de los tiempos es dura: padres que lo son por obligación, experimentos de reinvención personal que son performances sin público, unas tecnologías que lo penetran todo, incluyendo la intimidad. Ella y Él, ya próximos a los cuarenta, comienzan a habitar esos nuevos espacios posibles en paralelo, sin desgarros románticos pero con una fuerte añoranza misteriosa que tal vez vuelva a reunirlos.
“Mañana tendremos otros nombres” es una mirada a las relaciones sentimentales del animal humano desde una óptica sociológica que no excluye la ternura. Es, sobre todo, la gran novela del amor en los tiempos de las redes.
Editorial: Alfaguara