La Cámara de Diputados buscará aprobar el proyecto de financiamiento de las campañas políticas, que, entre otras cuestiones, levanta la prohibición para que las empresas privadas puedan aportar dinero a las campañas y bancariza esas colaboraciones, con el objetivo de que no haya fondos provenientes de actividades ilícitas.
La cantidad de diputados nacionales por ese distrito (18) y sus justificadas ausencias en Buenos Aires, motivaron la decisión de suspender la convocatoria, ya que la ley de financiamiento político se tiene que votar con mayoría calificada de 129 votos positivos.
Los votos de radicales y peronistas cordobeses eran claves para poder aprobar el proyecto, que fue rechazado por el Frente para la Victoria y otras bancadas afines al kirchnerismo y la izquierda.
En la sesión que comenzaría a las 11, el principal objetivo del interbloque Cambiemos-que conduce Mario Negri- es aprobar la ley de financiamiento electoral, que cuenta con dictamen de comisiones en base al texto enviado hace veinte días por el Senado tras el acuerdo entre el oficialismo y el PJ.
Para posibilitar la sanción, y ante la paridad de fuerzas entre oficialismo y oposición, el bloque del peronista MIguel Pichetto cedió y le permitió a Cambiemos avanzar con el texto que excluye como aportantes de campañas a los sindicatos.
Con la reunión de los votos de Cambiemos y del PJ el proyecto no tendría dificultades para ser aprobado con los 129 votos requeridos por la Constitución por tratarse de una ley electoral, más allá de que algún diputado peronista, de extracción sindical, decida abstenerse o votar en contra.