Un día como hoy pero hace diez años, alrededor de las 18 horas el mundo recibía una triste noticia. El célebre escritor, periodista y poeta uruguayo, icono de la generación del 45, fallecería a los 88 años de edad en su casa de Montevideo.
Mario Benedetti nació en septiembre de 1920 en la ciudad de Paso de los Toros, en el vecino país de Uruguay. Su carrera literaria comenzó a una edad muy temprana. En 1943 se colocó a la cabeza de la revista literaria Marginalia. Publicaría su primer obra, un poemario titulado “La víspera indeleble”, dos años mas tarde.
Aquel fue el puntapié inicial de una prolífica y larga trayectoria literaria que incluyó más de ochenta obras publicadas, algunas de las cuales fueron traducidas a más de veinte idiomas.
Sin lugar a dudas, su voz quedará marcada a fuego en la literatura latinoamericana, así como quedará inscrita en el firmamento de la literatura mundial.
Benedetti fue siempre un intelectual comprometido, tal es así que tuvo que exiliarse, como tantos otros, durante la dictadura militar uruguaya. Muchos de sus poemas están dedicados a las víctimas de la dictadura uruguaya. Su trabajo como escritor y como defensor de los derechos humanos se critalizará más tarde en la creación de la Fundación Mario Benedetti
“Creo que está muy vivo y eso es precisamente porque las nuevas generaciones lo aman, y, claro, las viejas también, eso es lo bueno”, dijo Hortensia Campanella, presidenta de la Fundación Mario Benedetti, durante una entrevista a EFE.
“Mario fue un escritor exigente, concentrado en su obra y muy llano y muy tierno diríamos con el ser humano”, afirmó Campanella.
A lo largo de más de sesenta años de trayectoria, su obra se caracteriza por atravesar varios géneros narrativos. El ensayo, la novela, el cuento y la poesía por mencionar alguno de ellos.
Su novela más famosa es, quizás, “La tregua” publicada por primera vez en 1960. También se destacan sus novelas “Primavera con una esquina rota” y “La borra del café”.
Entre sus poemarios, se destacan “El amor, las mujeres y la vida”, “Poemas de otros” y “Cotidianas”, entre tantísimos otros.
Ha recibido un sinfín de reconocimientos a lo largo de su extensa trayectoria. Entre ellos podemos mencionar el VIII Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, que recibió en 1999; las Medallas Gabriela Mistral (1995) y Pablo Neruda (2005) y el Premio Internacional Menéndez Pelayo.
No hay dudas de que el mundo de las letras sufriría una pérdida irreparable hace diez años. Sin embargo, tampoco hay ninguna duda de que Benedetti y su legado continuarán vivo en el corazón de sus lectores.