Desde el 5 de julio y hasta el 16 de agosto, el Museo Nacional de Bellas Artes organiza, con entrada gratuita, en la sala Amigos del Bellas Artes, el ciclo “Al Cinema! Una ventana sobre el nuevo cine italiano”, con ocho películas recientemente estrenadas en Italia, que tuvieron poca circulación en las salas comerciales argentinas.
Las funciones del ciclo, realizado con la colaboración del Instituto Italiano de Cultura en Buenos Aires y la Embajada de Italia en Argentina, programado por Leonardo D’Espósito, se realizarán los viernes y sábados en Figueroa Alcorta 2280, con entradas gratis disponibles un día de cada proyección y minutos antes del inicio, hasta colmar la capacidad.
Entre la selección de filmes se destacan el documental “Michelangelo Infinito”, de Emanuele Imbucci, acerca del artista del Renacimiento; “Dulces sueños” y “Sangre de mi sangre”, últimas obras de Marco Bellocchio; la comedia “Entre nosotros”, de Maria Sole Tognazzi; y la producción ítalo-argentina “El hombre que compró la Luna”, de Paolo Zucca.
El programa y horarios es el siguiente; “Michelangelo Infinito”, el 5 de julio y 16 de agosto, a las 19; “Sicilian Ghost Story”, de Fabio Grassadonia y Antonio Piazza, el 6 de julio, a las 17.30, y el 26, a las 19; “Entre nosotros”, de Maria Sole Tognazzi el 6 a las 20 y el 9 de agosto, a las 19.
El ciclo seguirá con “Amores frágiles”, de Francesca Comencini, el 12 a las 19, y el 20, a las 20; “Dulces sueños”, el 13, a las 17.30 y el 3 de agosto, a las 20, y “Sangre de mi sangre”, el 13 y el 20 a las 20, las dos de Marco Bellocchio; “Las maravillas”, de Alice Rohrwacher el 27, a las 20; y el 2 de agosto, a las 19.
El ciclo culminará con “El hombre que compró la Luna”, coproducción ítalo-argentina de Paolo Zucca, el 19, a las 19, y el 3 de agosto, a las 17.30.
5 películas para no perderse de “Al Cinema!
Michelangelo Infinito (Italia, 2018). Duración: 95′. Dirección: Emanuele Imbucci.
Síntesis: Recorrer y comprender la obra de uno de los genios del arte plástico es siempre un desafío para el cine. En este documntal se aborda la obra del genial escultor y pintor como algo épico, la lucha de un hombre por imponer una visión estética y dar vida, a través del arte, a la materia inerte. Más allá de la exhibición de obras extraordinarias, la cámara logra captar por qué son importantes, por qué son bellas. Es el ojo de la curiosidad ejercido en uno de los corpus más sublimes que ha dado el Renacimiento.
Sicilian Ghost Story. (Italia, 2017). Duración: 122′. Dirección: Fabio Grassadonia, Antonio Piazza.
Síntesis: Combinar el clima de un cuento de hadas con personajes muy jóvenes, la presencia de la mafia, el comentario político y la fantasía romántica no es tarea fácil. Sin embargo, esta película de los realizadores de la afamada Salvo logra combinar todos esos elementos en un mundo propio y en un relato totalmente hipnótico, que al mismo tiempo que da cuenta del paisaje social en el que viven los personajes, gira a lo fantástico de un modo natural hasta crear un ambiente poético de primer orden. Saludada en la Semana de la Crítica de Cannes, es además una obra totalmente original.
Io e Lei (Entre nosotras). (Italia, 2015). Duración: 102′. Dirección: Maria Sole Tognazzi.
Síntesis: A Maria Sole Tognazzi le cabe ser una de las directoras con mejor público en nuestro país, tras el éxito de Viaggio Sola, también, como Io e Lei, un film declinado en femenino. Aquí Margherita Buy y Sabrina Ferilli conforman una pareja a la que vemos enamorada, con una vida en común tras cinco años de relación. Pero algo pone en crisis a la pareja. De allí en más, con las mejores armas de la comedia romántica, Tognazzi desarrolla el tema de la aceptación y las diferencias -eso que complementa o justifica el amor- de un modo terso, realista y nunca forzado. Un ejemplo de cómo contar temas difíciles sin caer en el subrayado.
Amore che non sanno stare al mondo (Amores frágiles). (Italia, 2015). Duración: 92′. Dirección: Francesca Comencini.
Síntesis: La separación de una pareja y las dificultades de la mujer por rehacer una vida sin poder olvidar años de amor correspondido constituyen el tema de este film que es, por una parte, un gran trabajo sobre las reglas del melodrama. Por otro, una reflexión sobre la validez de ciertos tópicos, como el del amor devocional o la interferencia de la vida profesional -aquí tenemos a dos intelectuales- en lo cotidiano, incluso en la relación de pareja. Con momentos de enorme sutileza alternados con otros de emociones tensas, Comencini logra cincelar de manera precisa el retrato de una mujer de poco más de cuarenta años que se enfrenta a una encrucijada absoluta.
Fai bei sogni (Dulces sueños). (Italia, 2016). Duración: 141′. Dirección: Marco Bellocchio.
Síntesis: Cada película de Bellocchio demuestra que se trata de un maestro, especialmente porque -como alguna vez describió Andrew Sarris- puede resolver todos los problemas técnicos del cine. Dicho de otro modo: es capaz de contar y mostrar aquello que desea sin esfuerzo. Aquí tiene una historia doble, la de un niño con una infancia idílica destrozada por la muerte de su madre, la del hombre que fue ese niño enfrentado con los recuerdos de aquellos tiempos un poco por amor, un poco por necesidad. Bellocchio pone en imágenes las variables de los lazos familiares con una naturalidad y un riesgo notables, sin dejar en ningún momento que la historia nos deje de lado.