El famoso director no tiene intenciones de reeditar su último filme, “Había una vez en Hollywood”, para adecuarlo a los estándares impuestos por la censura de los reguladores de China, que suspendieron su estreno en el país.
Como el estudio productor del filme, Sony Pictures, no emitió ningún comunicado oficial al respecto, el periodismo especializado norteamericano especula con que la principal razón para el veto de los censores chinos es el modo en que Tarantino representó en la cinta al actor y artista marcial Bruce Lee.
Familiares y amigos de la estrella, en particular su hija Shannon, habían criticado el retrato que Tarantino hacía de él, e incluso apelaron a la Administración Nacional de Cine de China para que demandara cambios en sus escenas.
Pese al inmenso mercado que supone China y a la posibilidad de seguir sumando una buena cantidad de dólares a la que ya es la segunda película más recaudadora de su carrera como director, el director se mantiene en su postura de “tómalo o déjalo”, aseguraron los medios de Hollywood.
(Fuente Telam)