Según datos de la Cámara Argentina del Libro, la producción acumulada al tercer trimestre mostró un retroceso de 45 puntos porcentuales en la cantidad de ejemplares, respecto al mismo período que en 2016.
La tirada promedio de los lanzamientos editados por el sector comercial, pasó de 2700 ejemplares en 2016 a 1700 en 2019. La mayoría de estas novedades salieron al mercado con una tirada de apenas 1.000 ejemplares, lo cual se traduce en menos de un ejemplar por cada librería en la plaza local.
El informe de la CAL también brinda resultados de una encuesta realizada entre sus socios, la mayor parte editoriales PyMES. Allí el 60 por ciento de ellas manifestaron que durante el último trimestre percibieron caídas en las ventas que van entre un 5 y más de 20 puntos porcentuales. Ante la pregunta de si habían tomado alguna medida frente a la crisis, 7 de cada 10 declararon que debieron modificar su plan editorial, y la mitad de los editores debieron rechazar obras por falta de presupuesto. Coincidiendo con los datos observados en el registro de ISBN, el 62 por ciento declaró que realizó tiradas más pequeñas.
Ante la consulta a los socios de la CAL sobre las expectativas para la empresa propia para los próximos seis meses, el 44 por ciento afirmó que la situación será igual a la actual, el 37 por ciento señaló que está será peor y apenas el 12 por ciento de los encuestados dijo que vendrán tiempos mejores. En tanto el seis por ciento respondió que su situación económica será mucho peor y el 2 por ciento, que será mucho mejor.
La misma pregunta, pero sobre la situación del sector dio como resultado que el 54 por ciento cree que los próximos seis meses serán peores, mientras que el 27 por ciento consideró que serán mejores. Otro 19 por ciento respondió que lo que viene será mucho peor.