Una de las voces más emblemáticas de la literatura chilena, Germán Marín, fallecía este 29 de diciembre en el hospital Santiago de Chile, donde se encontraba internado, informó el director Ediciones UDP, su casa editorial.
Marín nació en el vecino país en 1934. Es considerado uno de los autores fundamentales de la narrativa chilena. Multipremiado y reconocido por sus pares y por los lectores, Marín es autor de numerosas novelas y ensayos que desnudan la realidad política chilena hasta su fibra más íntima.
El literato chileno es reconocido por escribir sobre temas incómodos de la historia reciente de su país. “Escarbaba en los lugares dolorosos de la memoria”, asegura su amigo, el poeta y editor, Matías Rivas en declaraciones recogidas por el diario El País.
Estos temas se plasman claramente en “El círculo vicioso”, el primer tomo de la trilogía “Historia de una absolución familiar”, la obra “más rotunda escrita por un chileno en el siglo pasado“, según el escritor Raúl Zurita.
Marín acudió a la Escuela Militar, donde tuvo de instructor a Augusto Pinochet. Luego de algunos años se mudó a Buenos Aires con su madre donde estudió en la Facultad de Filosofía y Letras, en donde tuvo al gran Jorge Luis Borges como maestro.
Su primera novela, “Fuegos artificiales”, vio la luz poco antes del golpe de Estado de 1973. Con el ascenso del pinochetismo al poder, Marín se exilia en México. Allí comenzó a trabajar en Siglo XXI Editores y, al poco tiempo, conoció a Gabriel García Márquez con quien colaboró en la escritura de discursos, prólogos y catálogos. La estadía en México fue breve y partió rumbo a Barcelona. Allí se desempeñó como editor en Seix Barral y Editorial Labor.
Con el advenimiento de la democracia, Marín regresa a Chile donde se pone al frente del sello Sudamericana y Random House Mondadori. “El palacio de la risa”, libro clave “para entender la dictadura y la violencia política que marca la historia de Chile”, según Diego Zúñiga, vio la luz en 1995.
El 2019 se despidió con una triste noticia para la literatura hispanoamericana pero el legado de la voz de Marín continuará presente en cada una de sus obras.