El público comienza dividido en dos salas; la sala de cine emblemática del Teatro San Martín o en las salas del Centro Cultural San Martín. “Siempre me interesó pensar qué le suceden a los espectadores que van a ver una obra de teatro, si eso puede transformar o afectar sus vidas de alguna manera. En algún momento, surgió esta idea de hacer una película que cuenta la historia de un grupo de espectadores que van a ver una obra de teatro y lo seguimos durante las veinticuatro horas siguientes para ver de qué manera lo que vieron modificó o no sus vidas cotidianas”, dice Mariano Pensotti sobre la creación de este proyecto en conjunto con Grupo Marea –Mariana Tirantte, Diego Vainer, Florencia Wasser-.
La experiencia incluye once cortometrajes. Todas las historias están unidas por la idea de que los protagonistas fueron a ver una obra de teatro el día anterior. Tras ver ocho cortometrajes en las salas de cine, los espectadores y las espectadoras son guiados por una banda de música en vivo hacia el Metropolitan Sura, lugar donde terminan uniéndose. “Durante la caminata, el público va pasando por varias locaciones donde se filmaron los cortometrajes. Casi todas las historias suceden en el centro porteño”, señala Pensotti. Y agrega: “En el teatro Metropolitan, el público real termina sentado en el mismo lugar donde estaba sentado el público ficcional de la película”.
Para el director de propuestas como El pasado es un animal grotesco o Cineastas, el verdadero desafío “fue transformar el Metropolitan Sura en una sala de cine y buscar formas donde el espectador se desplace en vivo”. “Mover cuatrocientas personas por la calle es todo un desafío”, señala.
Los retos no quedaron ahí. Para realizar esta película, el grupo convocó a una gran cantidad de actores y actrices, con algunos ya habían trabajado y con otros no. “Fui muy afortunado porque toda la gente que quise llamar para el proyecto, quería y podía hacerlo. La mezcla de actores y actrices que participan es bastante representativa de la diversidad teatral que hay en Buenos Aires en este momento. La obra fue muy construida en colaboración con esos actores y actrices. Por más que los guiones estaban escritos, siempre hubo espacio para la improvisación”, dice Mariano Pensotti:
Mariano Pensotti y el Grupo Marea tienen una larga trayectoria en realizar proyectos donde se entrecruzan el cine, el teatro y las artes performáticas. En 2014, estrenaron Cineastas, en el Centro Cultural San Martín donde se ponía el acento en la historia de cuatro realizadores y las películas que filmaban durante un año. Había una puesta en escena con dos escenarios simultáneos; en uno se representaban la vida de los directores y, en el otro, las ficciones. Con la nueva pieza del binomio Pensotti- Grupo Marea, se pretende invertir la mirada y poner el foco en la audiencia teatral. “Las historias de Cineastas estaban hechas de una manera ultra teatral, no había proyecciones ni ninguna escena filmada. Se hablaba de cine, pero todo era realizado a través de un medio efímero como el teatro. Con El público, la idea fue hacer exactamente lo opuesto; hacer una película donde los espectadores fueran los protagonistas. Si bien los personajes están hablando todo el tiempo de la obra de teatro que vieron y todo el tiempo está sobrevolando algo en relación a lo teatral, también había una intención de que se rescatara a los espectadores con el formato y la materialidad”, cuenta Mariano Pensotti.
Sin olvidar el tinte político, los cortometrajes transcurren en los agitados días de diciembre del 2001. Y en algún punto circula la idea de qué son las audiencias. “La idea de ser espectador o la idea de ser protagonista es algo que viene circulando en algunas de las últimas obras del Grupo Marea. Es interesante pensar eso desde una mirada política: ¿En qué medida somos espectadores de un mundo que se ha vuelto un gran show? Y ¿En qué medida estamos dispuestos a ser protagonistas de ciertas cosas de la historia? En ese sentido, la obra de teatro que verán los espectadores de la película sucede en el 2001, un momento donde la gente dejó de ser espectadora para volverse protagonista masivamente de cambios y protestas sociales”, reflexiona Mariano Pensotti.
Funciones: Entrada gratuita con reserva online a través de la página del Festival Internacional de Buenos Aires (www.buenosaires.gob.ar/fiba)