En el día de ayer, el mundo de las letras recibía una triste noticia. Ernesto Cardenal, el poeta y sacerdote nicaragüense, fallecía a la edad de 95 años, tras perder la batalla contra una infección renal que padecía desde hace algún tiempo, según confirmó su asistente personal, la también poeta Luz Marina Acosta.
El poeta, que permanecía internado desde el pasado 4 de febrero por la mencionada afección, fallecería finalmente a la edad de 95 años.
Ernesto Cardenal nació en la ciudad de Granada, Nicaragua en 1925. Además de ser poeta y traductor, es sacerdote y teólogo. A lo largo de sus 95 años, también incursionó en la escultura y en la política.
Cardenal, a quien el papa Francisco levantó la suspensión “A divinis” en febrero del 2019, impuesta por Juan Pablo II por mezclar la religión con la revolución sandinista, es uno de los autores vivos más importantes de Latinoamérica.
Conocido por su obra “Epigramas” (1961), es uno de los poetas nicaragüenses más laureados a nivel internacional, con una obra traducida en más de 20 idiomas.
Multifacético y versátil como pocos ha recibido una gran variedad de reconocimientos a lo largo de su vida. Entre ellos se destacan el Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda en el año 2009; el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, en 2012 y el Premio Mario Benedetti otorgado en el 2018.
Es autor de más de una treintena de poemarios y novelas. Entre sus obras se destacan: “Canto cósmico”, “Los ovnis de oro: poemas indios”; “Hora 0” y “Oración por Marilyn Monroe y otros poemas”.
