La industria del cine podría desplomarse por el coronavirus

Al cierre de las salas en China se suman cancelaciones de estrenos y suspensiones de rodajes.

Por estos días, no hay una industria que no se vea afectada por la epidemia de coronavirus. El turismo y, fundamentalmente, el entretenimiento, son dos de los rubros más perjudicados por la expansión de la infección provocada por el virus de Wuhan y, ante este panorama, algunas estimaciones ya dan cuenta que, por lo menos para el cine, las pérdidas podrían alcanzar los 5 mil millones de dólares.

Después de un 2019 positivo para el sector, la industria cinematográfica se ve especialmente golpeada por las medidas de cuarentena y aislamiento, especialmente en China. Allí, 70.000 salas de cine debieron cerrar sus puertas, según señaló The Hollywood Reporter, para no favorecer el aumento de los contagios del virus respiratorio que ya provocó más de 2.900 muertes a nivel global.

El cierre de los cines en China, claro está, ya se siente en los números de recaudación por corte de entradas. Según el medio estadounidense, del 24 de enero al 23 de febrero de este año los ingresos por tickets fueron de 4,2 millones de dólares, una diferencia de 1,76 mil millones respecto al mismo periodo de 2019. Las consecuencias de la epidemia recuerdan

La pandemia también provocó la cancelación de la nueva película de James Bond, No Time To Die, cuyo estreno estaba programado para el 2 de abril. Ahora, el público seguidor de las historias del agente 007 recién llegará los cines en noviembre. Mulán, la nueva apuesta en live-action de Disney, también podría correr la misma suerte.

La situación sanitaria también provoca que una película con cientos de millones invertidos como Mission Impossible 7 deba suspender su producción, que se estaba llevando a cabo en Italia, uno de los países con mayor número de casos diagnosticados por Covid-19. En este país, 850 salas de cine también se encuentran cerradas. Incluso, días atrás, informamos sobre la situación de suspenso en torno a la realización del Festival de Cannes, en Francia.

Por el coronavirus,la industria del entretenimiento transitará un año que difícilmente olvidará.