Las películas clásicas no suelen abundar en las plataformas de streaming. Y sobre todo, en Netflix, es una rareza total encontrar títulos que no sean hollywoodenses contemporáneos. Franz Capra, Alfred Hitchcock, Robert Mulligan son algunos de los directores del período clásico que pudieron encontrar un hueco en su catálogo. Dentro de ese universo de directores, Orson Welles es el más afortunado. En 2018, Netflix rescató Al otro lado del viento, la última producción del director estadounidense que dejó inconclusa tras su muerte. Acompañando el estreno de la película remasterizada, se podía disfrutar del documental Me amarán cuando este muerto, una atracción interesante para completar esta realización cinematográfica que vio la luz después de cuarenta años.
Oscilando entre idas y venidas, la oferta de Netflix incluye la película El extraño entre sus algoritmos y sus listas. Es uno de sus filmes menos conocidos de Orson Welles y con menores riesgos que otras películas de su filmografía.
La historia transcurre en Harper (Connecticut) una localidad apacible y serena, con habitantes siempre amables y dispuestos. Dentro de este escenario, lo central ocurre en una torre donde se encuentra el reloj que decora la plaza central del pueblo. Entre muchos de sus habitantes, está Charles Rankin, profesor de la escuela al que todos parecen adorar, incluso su esposa Mary Longstreet, hija de un reconocido juez local.
Como un clásico film noir y con las habituales marcas de Welles de develar pistas al espectador antes que a los propios personajes, muestra hacía la cámara que Franz Kindler no es la verdadera identidad de este maestro rural. Detrás de esa máscara de hombre afable y bondadoso, se esconde un criminal de guerra nazi. La aparente tranquilidad de Kindler se ve amenazada con la llegada Konrad Meinike, un antiguo militar. La presencia de esta persona también arrastra hacia el pueblo a otras como el inspector Wilson (Edward G. Robinson). Todas estas presencias ayudarán a sacar al monstruo que Kindler lleva escondido.
Con fuertes contrastes de iluminación, los claroscuros y las imágenes a contraluz se verán a lo largo de toda película para transmitir la inestabilidad emocional de Kindler que lucha por preservar su identidad secreta. Aunque el pasado ya no lo acecha, su presencia quedará grabada en la conciencia del protagonista. En el transcurso, el villano Kindler se verá visiblemente irritado y empezarán a aflorar en él actitudes manipuladoras, misóginas y oscuras. Ese personaje que pasa sus ratos libres ajustando las cuerdas del reloj de la plaza central, irá perdiendo sus estribos. Y el mecanismo que lo hacía girar todo en su favor, se irá desquebrajando.
El punto fuerte de la película son los personajes arquetípicos de El Extraño. Empezando por el señor Potter, el comerciante del pueblo representa la hipocresía de la sociedad y la indiferencia social en la que está sumergida el pueblo de Harper. Desde el comienzo, cuando Meinike deja su valija en la tienda del Sr. Potter y sin cuestionarse nada, es una de las lecturas políticas que Orson Welles desplegó para realizar una crítica a la sociedad norteamericana y su rol en la guerra.
El personaje de Mary representa la víctima-heroína de esta historia. Con este personaje, Welles recae en ciertos clichés que abundaban en la época sobre los papeles asignados a las mujeres en los filmes de cine negro. Mary es la última que puede reconocer la verdadera identidad de Kindler. Aunque se puede ver cierta evolución del personaje ante los hechos que le van sucediendo, solo adquirirá una idea acabada de los horrores cometidos por su marido cuando su padre y el señor Wilson le muestran archivos de los crímenes que cometió durante la guerra. Aunque la historia se incluye en cada recoveco del film, esta escena tiene un detalle histórico para la cinematografía universal; se reproducen fragmentos reales del período. Un cruce entre realidad y ficción que Orson Welles pudo hacer. Fue la única concesión que tuvo frente a otros pedidos denegados por la producción de la película.
Uno de los rasgos formales también que hacen de El Extraño una película clásica de cine negro es la presencia del personaje señor Wilson, el detective que va en búsqueda de la verdad y cumple con su deber en el tranquilo y pacifico pueblo de Harper, un lugar poco habitual en el cine negro que prefiere tomar las grandes urbes como escenarios. Aunque no es una de las películas más notables de Orson Welles, presenta ciertas actuaciones muy sobreactuadas, en esta película siguen sobreviviendo algunos rasgos del sello Welles. La composición de los espacios como signos que definen lo que sienten o piensan los personajes, algunos movimientos de cámara para enfatizar ciertos lugares emblemáticos como la torre de Harper.
El extraño (The Stranger)
FICHA TÉCNICA:
Dirección: Orson Welles
Reparto: Edward G.Robinson, Loretta Young, Orson Welles, Philip Merivale, Richard Long, Konstantin Shayne, Billy House, Martha Wentworth, Byron Keith, Ethan Laidlaw, Ruth Lee, Pietro Sosso, Isabel O`Madigan, Erskine Sanford, Rebel Randall
Thriller psicológico, EE.UU, (1946), 95 min,
