El Tribunal en lo Criminal Nº 2 de Jujuy absolvió a la dirigente de Tupac Amaru Milagro Sala en la causa conocida como la “balacera de Azopardo”, ocurrida el 27 de octubre de 2007.
La líder de la agrupación estaba acusada por tentativa de homicidio, pero los jueces aplicaron el principio de “in dubio pro reo” y dispusieron la liberación de Sala.
“Es una pequeña luz de esperanza de que se está haciendo justicia ante la persecución política que están sufriendo muchos compañeros nuestros. No lo esperaba, me sorprende muchísimo”, celebró Sala, en declaraciones periodísticas formuladas al terminar la audiencia.
La dirigente continuará detenida en el marco de causas judiciales por el desvío de fondos públicos destinados a viviendas sociales y la ocupación de la plaza principal de San Salvador de Jujuy, durante una protesta. Además, Sala está condenada a tres años de prisión en suspenso por un escrache realizado al actual gobernador de la provincia, Gerardo Morales, en 2009.
Por la “balacera de Azopardo”, la Justicia condenó a Fabián Ávila, a la pena de seis años y seis meses de prisión, como “autor material y responsable de homicidio simple en grado de tentativa y lesiones graves en concurso real”.
Alberto Cardozo, acusado por “homicidio simple en grado de tentativa”, fue absuelto. Cardozo permaneció detenido preventivamente tres años.
“Simplemente, la verdad que me duele en el alma como persona, porque valoro la vida, que hayan tenido que torturar a Cardozo, Ávila y otros compañeros más para que tenerme parada acá”, señaló Sala, en su alegato final. “Ustedes siéntanse libres por las decisiones que tomen, porque ustedes se quedan acá, pero los gobiernos se van, los gobiernos que toman determinaciones para perseguir a algunos sectores políticos que no están de acuerdo con lo que ellos piensan”, agregó, dirigiéndose a los jueces del tribunal.
La Fiscalía había pedido la pena de 12 años de prisión para Sala como coautora de “homicidio agravado por precio a promesa remuneratoria en grado de tentativa”.
Originalmente, Sala estaba imputada por “encubrimiento”, pero el testimonio de Jorge Paes, testigo protegido, la involucró directamente en los hechos. Elizabeth Gómez Alcorta, la abogada defensora de Sala, denunció un supuesto “armado judicial” para perjudicar a Sala. “El principal ejecutor fue el juez Pablo Pullen Llermanos”, apuntó la letrada.
La “balacera de Azopardo” se produjo en 2007, en el barrio San Francisco de Alava (antes llamado Azopardo), de San Salvador de Jujuy. Como consecuencia del tiroteo, una niña de 11 años, que estaba en una carnicería, resultó herida de gravedad en el abdomen.