Apuesta a las historias reales

Hoy se estrena por Netflix “Grace Marks”, la adaptación del libro homónimo de Margaret Antwood, basada en un hecho real

Entre las series esperadas para noviembre, entre continuaciones y estrena, la segunda adaptación de otra de novela de Margaret Atwood “Alias Grace”, es una de las recomendadas. Se estrenó hoy por Netflix.

Después del éxito que representó “The Handmaid’s Tale”, la adaptación de la novela distópica que representa un mundo cuyo rol femenino está ligado al acompañamiento, la esclavitud, y la concepción, ahora nos llega en formato de miniserie de seis episodios “Alias Grace”, que adapta la novela homónima que publicó la autora canadiense en 1994.

En esta oportunidad, Antwood narra el caso de Grace Marks, una inmigrante irlandesa que llegó a Canadá en el siglo XIX y a los 16 años fue condenada y encarcelada por el asesinato del ama de llaves de la casa en la que trabajaba como criada. Una criada diferente a las de The Handmaid’s Tale, pero que vivió también una vida llena de penurias y maltratos en una época que bien parece una distopía.

 

 

De todas, maneras, hay similitudes: la protagonista cuenta su historia en primera persona y una voz en off relata los acontecimientos según transcurren en su cabeza, que por momentos condice con sus actos, y por momentos no. También pinta de manera crítica el rol de la mujer, y la sociedad de época.

La historia de Grace Marks es real. Antwood, se basó para escribirla en los documentos públicos del juicio, correspondencia y recortes de periódicos de la época y, para construir su relato, creó al personaje de Simon Jordan, un alienista (nombre que se le daba a los psicólogos en la época) contratado por un grupo interesado en que analice a Grace y elabore un informe que sirva para demostrar su inocencia, ya que la condena de Marks fue controvertida, dado que nunca se estableció si ella era autora del crimen, o tan solo cómplice.

Las temáticas trabajadas en “Grace Marks”, tienen como eje la situación política del momento, las diferencias de clases, la injusticia, la pobreza, la represión y la opresión. Por momentos, la historia también tiene algo de cuento de terror gótico, debido al tono de la narración de Grace, la influencia de los sueños y las imágenes del subconsciente, y a las supersticiones, como ventanas que deben abrirse para que los espíritus puedan escapar.

Al estar basada en un caso real, Alias Grace también explora el misticismo que rodea a los criminales hasta convertirlos en celebridades y la fascinación que nace del morbo innato del ser humano que siente un extraño placer al creer haber descifrado sus motivaciones.

Un serie que vuelve a poner en tela de juicio el rol de la mujer, los prejuicios, las sociedades y sus prácticas, de la mano de la pluma de Antwood, que también colaboró con el rodaje, y la puesta de Netflix, que ya se consagró como efectiva.