La gestión de Mauricio Macri transmitió al gobierno de Chile “su grave preocupación por los hechos de violencia” que se produjeron ayer en el consulado argentino en Santiago de Chile.
Según un comunicado de Cancillería, el ataque “afectó las oficinas consulares y parte de la residencia del embajador de nuestro país en la capital chilena”.
“Ayer por la tarde, un grupo de encapuchados violentos trataron de invadir la sede diplomática argentina, arrojando piedras y objetos con fuego que dañaron y rompieron parte del inmueble de la sede diplomática argentina en ese país”, explicó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
“La República Argentina condena este acto de violencia y vandalismo y repudia firmemente este tipo de manifestaciones como forma de expresión pública y de promoción de ideas políticas”, manifestó el comunicado.
Esta mañana, el embajador argentino en Chile, José Octavio Bordón, confirmó que un grupo de manifestantes ingresó y atacó con palos y piedras el consulado argentino en Santiago de Chile, durante una protesta mapuche.
El funcionario indicó que los manifestantes, que entre otras proclamas reclamaban por Santiago Maldonado, rompieron la reja de ingreso a un patio trasero del edificio, destruyeron un automóvil y rompieron vidrios.