Austria se convirtió hoy en el primer país de la Unión Europea (UE) que prohíbe la utilización a nivel nacional del herbicida glifosato en la agricultura. La medida se da después de que el Parlamento de Viena adoptara de forma mayoritaria una moción del partido socialdemócrata SPÖ, según informó la televisión pública ORF.
El glifosato es el herbicida más utilizado en los campos europeos, pero sus efectos sobre la salud y el medioambiente son el centro de grandes polémicas. Sin embargo, los especialistas en Austria advierten que la prohibición adoptada hoy podría ser contraria a la legislación europea, que permite el uso del glifosato a nivel comunitario hasta finales de 2022.
La iniciativa socialdemócrata recibió el respaldo del partido ultraderechista FPÖ, de los liberales Neos y de la lista progresista Jetzt, mientras que el partido popular ÖVP votó en contra, que calificaron a la iniciativa como “una bofetada para todos los agricultores que usan esta sustancia de forma correcta”. En tanto la organización medioambiental Greenpeace habló de un “histórico éxito”.
La Organización Mundial de la Salud incluyó, en 2015, al glifosato entre el grupo de sustancias que “probablemente” sean cancerígenas para los huamnos. Sin embargo, esta advertencia se hizo en base a una evidencia “limitada” de estudios específicos.
El glifosato está presente en los herbicidas fabricados, entre otros, por Monsanto, Syngenta o Bayer. Los estudios sobre las consecuencias del glifosato difieren, ya que la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) juzgó como “improbable” que el glifosato fuera cancerígeno.
En otros país, como Italia y Portugal, el uso de este herbicida fue prohibido en parques y jardines públicos. La misma medida tomó la ciudad canadiense de Vancouver. En tanto en Estados Unidos, este año la Agencia de Protección Ambiental de ese país señaló que “el glifosato no es un cancerigeno”.
(Con información de Télam)