La decisión fue adoptada ad referéndum de la Secretaría de Gobierno de Energía, mediante la resolución 84 del ENRE, que se publica en el Boletín Oficial.
El Ente también aprobó el respectivo contrato de concesión de transporte de energía eléctrica de interconexión internacional.
La empresa boliviana ENDE había solicitado la autorización en su carácter de participante del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), en virtud del acuerdo binacional de intercambio de energía firmado en octubre de 2015.
ENDE y Etasa obtuvieron un Certificado de Conveniencia y Necesidad Pública para realizar las obras de transporte que permitirán a la Argentina importar energía eléctrica generada en la Planta Termoeléctrica del Sur.
Esa central térmica, de 160 Mw de potencia, se ubica en el departamento Tarija, provincia Gran Chaco, Bolivia.
Tras la autorización argentina, Etasa llevará adelanta la construcción de un electroducto de alta tensión de 2 x 132 kV desde la estación Tartagal, Salta, hasta el nodo frontera Bolivia-Argentina, fijado en el límite internacional.