Los dramas de época y de la alta sociedad viven su momento. Se ve con The Crown, y ahora es el turno de Bridgerton, otra serie de Netflix, que en su primer mes en el servicio de contenido ya alcanzó un record: es la producción más vista en sus primeros 28 días.
Según dio a conocer el medio especializado Deadline, la serie fue vista en más de 82 millones de hogares alrededor del mundo, lo que marca un record para Netflix (actualmente Netflix tiene unas 200 millones de suscripciones).
Así, la serie sobre ocho hermanos de la alta sociedad londinense del siglo XIX que buscan la felicidad y el amor superó a The Witcher, que en su primer mes había registrado 76 millones de visualizaciones.
En países como Estados Unidos, Reino Unido, Brasil, Francia, India o Sudáfrica, esta nueva historia se posicionó en el puesto número 1 de todos los contenidos. Tal vez por esto no extraña tanto que Netflix haya anunciado la realización de una segunda temporada de la serie, inspirada en los libros de Julia Quinn.
De hecho, según Netflix “el éxito” de la serie protagonizada por Adjoa Andoh,Julie Andrews y Lorraine Ashbourne impulsó los libros de Quinn a la lista de bestseller del The New York Times “por primera vez 18 años”.
El problema en todo este anuncio es que Netflix hace su contabilización de las visualizaciones de una manera muy particular: la plataforma tiene en cuenta que el usuario al menos haya visto dos minutos de la serie. Con eso, ya alcanza para engrosar la estadística. Tal vez con información acerca de cuántos usuarios vieron por lo menos un episodio completo los datos se acerquen un poco más a la realidad.
