El empresario Ángelo Calcaterra y primo del presidente Mauricio Macri admitió que pagó sobornos a funcionarios de la gestión kirchnerista para las campañas electorales de 2013 y 2015 y aceptó ser “imputado colaborador”.
Tras firmar el acuerdo, el empresario se retiró de los tribunales federales ubicados en Comodoro Py 2002, con eximición de prisión.
Calcaterra era dueño de la constructora IECSA, una de las empresas mencionadas en los cuadernos de Oscar Centeno, el ex chofer del ex funcionario del Ministerio de Planificación Roberto Baratta. Ambos están detenidos preventivamente desde el miércoles pasado, en el marco de la causa que investiga una presunta asociación ilícita entre ex funcionarios y empresarios para el desvío de fondos públicos destinados a la obra pública.
El primo del presidente se presentó esta mañana en el juzgado de Claudio Bonadio y declaró ante el magistrado a cargo de la causa.
Calcaterra dijo que fue “apretado” por funcionarios del kirchnerismo para que aportara dinero para la campaña electoral.
El empresario se presentó espontáneamente ante la Justicia ya que, hasta ahora, no había sido citado por el magistrado.
Calcaterra es el cuarto “imputado colaborador” que se sumó a la causa ya que la semana pasada lo hicieron Centeno y los empresarios Juan De Goycochea y Javier Sánchez Caballero, uno de los directivos de IECSA.
El empresario indicó que durante la gestión kirchnerista exigían “retornos” en efectivo para liberar los pagos por las obras públicas en marcha.
Calcaterra se deshizo de IECSA el año pasado, cuando se la vendió al empresario Marcelo Mindlin, presidente de Pampa Energía y Edenor. El primo del presidente había adquirido la constructora en 2007, cuando la compró a la familia Macri.
(Con información de NA)