El canciller Jorge Faurie declaró hoy que el gobierno de Mauricio Macri procura tener “una política exterior pragmática” ante los desafíos del mundo globalizado y advirtió que, si bien se trata de una política “no tan ideologizada”, esto “no quiere decir” que sea un proyecto “sin ideas”.
“Procuramos tener una política exterior pragmática para poder responder a cada uno de los desafíos, no tan ideologizada no quiere decir que no tengamos ideas. Es una política de libertad, de respeto de los derechos humanos, de defensa de las libertades económicas”, remarcó ante los senadores.
Faurie ratificó que la administración de Cambiemos busca “una inserción inteligente” en el mundo frente a lo que calificó como “una ausencia que tuvo en los años precedentes en distintos mercados y organismos internacionales”, y ponderó la presidencia del G-20 que este año ejerce Argentina.
En ese sentido, destacó que a Argentina se le “reconozca la posibilidad de ejercer la presidencia del G-20” cuando no es “la economía más grande del mundo, no tiene una influencia militar significativa y no es principal actor en grupos de comercio”.
“Se trata -declaró- de un reconocimiento a la formación y a la capacidad de un país que no está entre los principales liderazgos pueda hacer una labor de aporximación de poder dar una visión diferente desde otra parte del mundo y provocar el surgimiento de diálogo entre las distintas naciones”.
Faurie analizó que otro de los motivos por los que Argentina es reconocida para ejercer la presidencia del G-20 es que “la nuestra es una visión desapasionada y objetiva”.
En ese sentido, y específicamente sobre el comercio internacional, el canciller consideró que “hay que rediscutir algunas normas de comercio internacional porque es obvio que la participación de grandes productores no es lo mismo que países chicos y por lo tanto la regla de que todos somos iguales debe tener una visión más racional”.
Ante los senadores de la comisión que preside el senador Julio Cobos, el ministro ratificó la intención del gobierno argentino de “ampliar su vinculación” con los países miembros del Mercosur para el “acceso de los productos argentinos en el espacio regional” y lograr “un mayor grado de apertura”.
