La derrota de All Boys, por 3 a 2, en el partido de ayer volvió a generar episodios de violencia en el fútbol, cuando un grupo de hinchas y barrabravas del equipo de Floresta atacaron a la Policía de la Ciudad.
Tras los incidentes, quedaron detenidas tres personas y varios policías fueron heridos, según informó el Ministerio de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires. Esta mañana se ordenaron allanamientos y quedó clausurada la cancha “por tiempo indeterminado”. Además, las autoridades del Gobierno porteño pedirán que durante este año y el que viene los partidos que se jueguen allí sean sin público visitante.
En el procedimiento de esta mañana, se incautaron computadoras con la lista de socios y las cámaras de seguridad, según consignó la agencia de noticias NA de fuentes judiciales. Por la reacción de los hinchas y barrabravas, están siendo investigados los directivos de All Boys.
“En las investigaciones, surge que algunos dirigentes están involucrados”, reveló el secretario de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Marcelo D´Alessandro. “Queremos separar a algunos dirigentes que tienen relación con los violentos”, agregó.
“La dirigencia también, a veces, facilita guardar elementos que están prohibidos, como banderas o bengalas. Iremos con los violentos hasta las últimas consecuencias. Están identificados y puede haber más detenidos
en las próximas horas”, explicó D´Alessandro.
“La cancha ya está clausurada y no va a jugar por mucho tiempo con público, porque hay que terminar con esta conducta violenta. Vamos a ser implacables con eso”, aseveró el ministro de Seguridad porteño, Martín Ocampo, en declaraciones televisivas. “A todos los que participaron de estos eventos los vamos a poner en la lista de admisión y vamos a pedir que juegue sin público hasta fin de año y, después, todo el año que viene”, agregó.
Por otro lado, Ocampo indicó que la institución se tendrá que hacer cargo del “arreglo de los patrulleros” que fueron dañados.
Los ataques se produjeron con piedras, palos y otros elementos contundentes. Los policías, que intentaron escapar marcha atrás en los patrulleros, chocaron y los hinchas los rompieron.
El vicepresidente de Atlanta, Alejandro Korz, criticó el operativo policial en el partido de ayer contra All Boys y denunció que los directivos que estuvieron en el estadio Islas Malvinas, ubicado en el barrio porteño de Monte Castro, no se sintieron “protegidos”.
“Creo que hubo una mala lectura del operativo policial, donde no se supo interpretar lo que significa un partido entre dos equipos con rivalidad. En nuestra tribuna no había un policía, no nos sentimos protegidos”, se quejó el dirigente de Atlanta, en diálogo con la agencia de noticias NA.