A un clic del cine

Desde hoy y hasta el 19 de febrero próximo se podrá disfrutar, desde la comodidad de casa, de “My French Film Festival”, el festival de cine llevado “proyectado” vía streaming

En su octava edición, “My French Film Festival” pone a disposición de los espectadores la posibilidad de disfrutar, a través de streaming, diez largometrajes en competencia y otros tantos cortos, más siete títulos extra. En América latina el acceso es gratuito.

Es el caso de “My French Film Festival” (Mi Festival de Cine Francés), una propuesta innovadora que acerca y da visibilidad, de manera gratuita en America Latina, a “la joven generación de cineastas franceses y la posibilidad a los internautas del mundo entero de compartir el amor que sienten por el cine francés”.

 

 

Las practicas de circulación y consumo de los bienes culturales, sean éstos musicales, gráficos, audiovisuales, están cambiando sus paradigmas. Mientras algunos artistas están en disputa con Spotify por sus derechos de autor y los porcentajes que rodean la circulación de esos contenidos, otros son de libre acceso y, en este caso, hasta toman el formato de Festival.

Lejos de hacer una valoración moral sobre el canal, es interesante que por un lado, conceptos como el de “Festival” donde la premisa es la concentración de determinado trabajo con la característica de ser presencial y colectivo mute desde las salas de cine, en este caso, a los livings de las propias casas, pudiendo acceder, por otro lado, a contenidos que, quizá por los costos (o lo intereses de los organizadores) no podrían de otra forma haber llegado, si no fuera de manera digital.

Organizado por UniFrance, la agencia de promoción del cine francófono del Centro Nacional de Cine y Animación de ese país, en su edición del año pasado afertó casi siete millones de visionados en 200 países y este año confían superar esas cifras. Si bien es un festival “pequeño”en términos de volumen (10 largometrajes en competencia y otros tantos cortos, más otros siete films de distinta duración por fuera), tiene una oferta variada en géneros y públicos objetivos, y un alcance mundial con pocos émulos.

En la Argentina, lo mismo que en el resto de América Latina, el acceso al festival es gratuito y basta con registrarse en su sitio web. Este beneficio también alcanza a Africa, India, Corea del Sur, Polonia, Rumania y Rusia. Para el resto de los espectadores que quisieran acceder, el costo es de 8 euros el acceso total (casi lo mismo que un mes de Netflix) o 2 euros por película.

Una de las novedades en torno al festival, no menor, teniendo en cuenta estas nuevas propuestas que se vienen desarrollando relativas a los consumos, es que 50 plataformas de video por demanda se sumarán al MyFFF, incluyendo iTunes, Amazon, MUBI, Google Play y, en América Latina, Qubit.tv.

Además, el “encuentro” digital ofrece un puñado de funciones presenciales. En la Argentina, la ocasión será el lunes 22 a las 19.30, con la proyección de Swagger, de Olivier Babinet, en la sede central de la Alianza Francesa de Buenos Aires (Córdoba 946). Este multipremiado documental retrata la vida de once niños y adolescentes de los barrios más perjudicados de Francia.

Al final del festival se hará entrega de tres premios: El “Premio Chopard de los Cineastas” cuyo jurado compuesto por directores internacionales; el “Premio Lacoste del Público”, categoría que invita a internautas del mundo entero a votar por sus películas favoritas en la plataforma del festival; y el “Premio de la Prensa Internacional”, entregado por un jurado compuesto por periodistas de grandes diarios extranjeros.

Los jurados de los cineastas y de la prensa internacional se reunirán en París durante el festival para elegir las películas ganadoras. A partir de julio de 2018, los filmes premiados se proyectarán a bordo de los aviones de Air France durante seis meses.