Desde hace algunos años, y ante la imposibilidad económica, o el deseo personal, las librerías puertas adentro se han convertido en esos tesoros para los lectores ávidos de novedades, ejemplares exclusivos o únicos, libros de colección, o ediciones especiales.
Son librerías generalmente administradas en casas particulares, cuyos dueños o dueñas son libreros de larga data con el objetivo, por un lado, de seguir retroalimentando el amor y la afición por estos objetos, que por momentos devienen en el fetiche del más hermoso y codiciado, y por otro lado, el de ofrecer espacios de apreciación detenida, especial, personalizada, y asesoramiento sobre contenidos que no suelen encontrarse en librerías masivas o comerciales.
Con la comodidad de un living, un espacio preparado y dedicado a la lectura, los libreros son los anfitriones que reciben y asesoran a sus visitantes, práctica que recuerda la riqueza del oficio y el criterio de selección. Algunas de estas librerías son temáticas, están especializadas a un rubro, o trabajan con determinadas editoriales, o simplemente buscan ejemplares únicos de cualquiera de los libros que les resulte un desafío tener.
En la lista de librerías a puertas cerradas, hoy se inscriben varias como “A cien metros de la orilla”, “Mi Casa Librería Atípica” y “Sur de Babel” o el club de libros y lectores “Escape a Plutón”.
“Sur de Babel” es otro de los espacios que se propone, además de circular desconocidos y raros ejemplares, poder generar un circuito de difusión y promoción del libro y su cultura. Una suerte de Club del Libro, fundado hace ya casi 8 años por dos jóvenes licenciadas en Letras, Victoria Rodríguez Lacrouts y Josefina Heines, que se manejan dentro del circuito de libros y editoriales independientes.
El sitio web de la librería “Mi Casa Librería Atípica” inicia diciendo: “Si buscás libros raros, descatalogados, de autor, o querés saber qué es lo que está pasando en la escena literaria local, llegaste al lugar indicado. Nos especializamos en poesía y narrativa contemporánea. También tenemos filosofía, teatro y ensayo.”
Nurit Kasztelan, su gestora y promotora, dejó su trabajo como economista en el estado para montar una librería en un cuarto de su PH de Villa Crespo. Hoy tiene más de seis mil libros, entre los que es posible encontrar raros, descatalogados o de pequeñas editoriales y extranjeros. Las visitas son arregladas por inbox, o por mail, pero si ya viste el catalogo online y sabes qué es lo que querés, podes hacer los pedidos vía internet, aunque claro, lo lindo siempre es poder acercarse al espacio.
Natalia Romero es la encargada de administrar “A Cien Metros de la Orilla” cuya entrada cuenta con una contraseña especial, que te da especialmente luego de concretar una visita. Una vez adentro, el mate y los libros priman, en estanterías que parecen una biblioteca personal, pero a la venta. Vende solo lo que a ella le parece pertinente, no siendo posible encontrar Best Sellers clásicos, sino más bien esos “inencontrables” de la literatura.
El caso de “Escape a Plutón” es similar a la estructura de Sur de Babel, pero con sistema de suscripción. Es un club de libros que todos los meses realiza una selección de lo más salvaje de la literatura mundial y la envía a la casa de sus socios en todo el país. Para formar parte de Escape a Plutón tenés que ingresar a la sección Asociate y completar el formulario de inscripción, en la que luego de abonar mensualmente la tarifa de $150.- por mes (que cubre los envios y colecciones online de e-books) también brinda 10% de descuento en nuestra Feria de libros y sorteos mensuales.
El espacio funciona como una curaduría de literatura contemporánea, recomendando textos y autores esenciales dentro del universo literario actual, tanto para adultos como en materia de literatura infantil.
Dime qué lees y te diré dónde encontrarlo.